Picasso nació en un criadero pero fue abandonado por ser diferente y mostrar una deformidad en su rostro.
Ciudad de México, 4 de marzo (SinEmbargo/ASMéxico).- Picasso es un pequeño perro de 10 meses que nació con una deformidad en su rostro. Su hocico está girado hacia la derecha y su mandíbula hacia la izquierda. Ser un animal diferente ha hecho que su vida no haya sido fácil. Nacido en un criadero, tras no poder ser vendido, el dueño decidió abandonarlo en una perrera en la que tenía los días contados.
Debido a que no podían hacerse cargo de él, el centro lo había puesto en la lista de animales a los que se les iba a practicar la eutanasia. En esa lista también estaba su hermano Pablo, similar a él pero sin las características evidentes del rostro de Picasso. Pero el destino de ambos ha cambiado.
Gracias a la organización estadounidense Luvable Dog Rescue, ambos animales están hoy a salvo.Tras mostrar las imágenes de Picasso y Pablo en sus redes sociales, la protectora ha asegurado que ha recibido multitud de «ofertas de personas de todo el país» dispuestas a adoptar a los hermanos.
Pese a las ofertas, Luvable pide paciencia. Antes, Picasso tendrá que ser intervenido con cirugía dental para intentar corregir su boca y así ayudarle a tener una vida lo más normal posible. Desde la organización advierten que los hermanos tendrán que vivir con la misma familia para así continuar con un destino que les ha unido.