En la nueva temporada de la serie, que inicia hoy, Underwood busca la reelección y lo hará como es costumbre en el programa escrito por Beau Willimon, quien acaba de renunciar y no estará para la quinta entrega- en un ambiente lleno de tensión, conflicto, engaño y muchas sorpresas.
Ciudad de México, 4 de marzo (SinEmbargo).- Cuando la ficción se confunde con la realidad y cuando la realidad es la serie House of Cards, cuya cuarta temporada está disponible a partir de hoy en Netflix, pasan cosas raras.
Por caso, que en la mismísima Galería Nacional de Retratos del Smithsonian de Washington esxhiba un retrato del actor estadounidense Kevin Spacey, realizado por el artista británico Jonathan Yeo.
Es así como Spacey vuelve a Washington, la ciudad de ambiciones y rivalidades feroces en la que se mueve como pez en el agua el ambicioso congresista convertido en presidente Frank Underwood, al que da vida en la aclamada serie televisiva.
Yeo ya había pintado a Spacey como el rey Ricardo III, obra que fue exhibida en la Galería Nacional de Retratos de Londres en 2003, un hecho que llena de honor al artista, feliz por “pintar a uno de los mejores actores de nuestro tiempo para una de las instituciones más importantes en el mundo”.
Pero ni Kevin Spacey ni Frank Underwood, se sabe, son en realidad el Presidente de los Estados Unidos, pero la criatura demoníaca inspirada en la novela de Michael Dobbs no sólo ha hecho grande desde su estreno en 2013 a la cadena de televisión por streaming Netflix, sino que también ha sabido mantener en vilo a millones de espectadores ansiosos por conocer la siguiente jugada de este titiritero desalmado y seductor.
En la nueva temporada de la serie, que inicia hoy, Underwood busca la reelección y lo hará como es costumbre en el programa escrito por Beau Willimon, quien acaba de renunciar y no estará para la quinta entrega- en un ambiente lleno de tensión, conflicto, engaño y muchas sorpresas.
Los 13 nuevos episodios tienen muy entusiasmado a su protagonista, quien en un comunicado de prensa distribuido por Netflix declaró sentirse “afortunado” por la “lealtad y la pasión” demostradas por los espectadores de todo el mundo, cuyo veredicto por la nueva temporada, el actor shakespeariano espera “con ansiedad”.
Al final de la temporada 3, el Presidente Frank Underwood enfrentaba la fractura de su matrimonio con Claire y del electorado, ahora tratará de juntar todas las piezas para encarar la próxima carrera hacia el sillón de primer mandatario.
Al elenco original se unen varios actores, por caso la veterana Ellen Burstyn, quien encarnará a la madre de Claire; Cicely Tyson se pondrá en la piel de una congresista texana y la joven canadiense Neve Campbell será Leann Harvey, una estratega política que se ganará la confianza de los Underwood.
Otras caras nuevas en el elenco de este año incluyen a Lisa Gay Hamilton, Joel Kinnaman y Dominique McElligott Mayfield; los productores prometen mostrar esta vez más mujeres en el poder, lo que sin duda satisfará al ya de por sí numeroso público femenino que tiene la serie.
Entre el atildado vestuario de Hugo Boss para Frank y la ropa impecable de Ralph Lauren para Claire, el matrimonio con más estilo que haya pisado la Casa Blanca se apresta a vivir una temporada llena de paranoia y manipulación.
Como dicen muchos internautas en las redes sociales: “No tomes compromisos para este fin de semana”. La espera terminó. House of cards ya está aquí.