Se trata del más reciente caso de corrupción donde se ve implicada la empresa brasileña y funcionarios de varios países latinoamericanos.
Por Franklin Briceño
Lima, Perú, 4 de febrero (AP).- Las autoridades peruanas allanaron el sábado la casa del ex Presidente Alejandro Toledo, a quien investigan por presuntamente recibir sobornos de la constructora brasileña Odebrecht para permitir la construcción de carreteras que unen a Perú con Brasil.
Se trata del más reciente caso de corrupción donde se ve implicada la empresa brasileña y funcionarios de varios países latinoamericanos.
La fiscalía indicó en su cuenta oficial de Twitter que continúa trabajando «por más de cinco horas en el allanamiento de casa de Alejandro Toledo» y añadió que «la documentación hallada en la vivienda será evaluada por el Ministerio Público».
Imágenes de televisión mostraron a personal encabezado por el fiscal Hamilton Castro, quien investiga los sobornos de Odebrecht en Perú, ingresar a la casa de Toledo en un barrio residencial de Perú.
En la víspera, Toledo negó al diario El Comercio haber recibido coimas de Odebrecht. «Yo no tengo nada», dijo por teléfono desde París donde asiste al Foro de Mercados Emergentes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El abogado Luciano López —que defendía a Toledo desde 2013— renunció el viernes pero sin mencionar las razones. «Nuestra firma no dará ninguna declaración a la prensa sobre nuestro ex cliente por responsabilidad profesional», dijo el abogado en un comunicado.
En enero, Odebrecht acordó otorgar información a la fiscalía sobre sus actos corruptos en Perú. Al momento han sido apresados tres funcionarios del gobierno del ex mandatario Alan García (2006-2011).
El actual mandatario Pedro Pablo Kuczynski, quien fue sucesivamente ministro de Economía y primer ministro del gobierno de Toledo (2001-2006), escribió en Twitter «la justicia debe ser igual para todos. Si alguien cometió actos de corrupción, debe ser sancionado».
En diciembre, el Departamento de Justicia de Estados Unidos informó que Odebrecht reconoció sobornos por 29 millones de dólares a funcionarios peruanos para ganar las licitaciones de obras públicas. Los hechos ocurrieron durante los gobiernos de Toledo, García y Ollanta Humala (2011-2016).
El Departamento de Justicia detalló que la constructora brasileña indicó que entre 2005 y 2008 pagó sobornos por 20 millones de dólares a un «alto funcionario» de Perú para ganar la licitación de un proyecto de infraestructura que se produjo durante el gobierno de Toledo.
Durante la gestión de Toledo empezó la construcción un plan de carreteras que unen Brasil con el norte y el sur de la costa del Pacífico peruana.