Los docentes que realizarán el examen y funcionarios de apoyo de la SEG y a SEP llegan a los hoteles de lujo Princess y Fairmont Pierre Marqués del Acapulco Diamante, donde los precios en esta temporada baja de turismo oscilan en mil 779 pesos, mil 822 y mil 850 pesos por noche más los impuestos.
Ciudad de México, 3 de diciembre (SinEmbargo/El Sur).- A un día de la evaluación docente, que harán a 396 maestros de educación media superior y 2 mil 618 de educación básica, elementos de la Policía Federal y Estatal colocaron seis filtros de vigilancia, o retenes, cuatro de resguardo y uno de revisión, para blindar la sede del examen, el Centro de Convenciones Mundo Imperial, en el Acapulco Diamante, e impedir que maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) lo boicoteen.
Alrededor de las 7:00 horas de este jueves, integrantes de la CETEG se movilizaron hacia el Centro de Convenciones, en Acapulco, donde se lleva a cabo la evaluación docente, para impedir que al menos 3 mil maestros realicen la prueba.
Desde el pasado fin de semana, la CETEG anunció que comenzaría la jornada de lucha contra la evaluación docente. Ayer, en su primera marcha en Chilpancingo, los maestros opositores amagaron con raparse y boicotear la prueba que se realiza hoy.
Hasta el momento no se han registrado incidentes en los puestos de control. Sin embargo, medios locales han informado que el contingente de al menos 2 mil integrantes de la CETEG están a 50 metros de la sede de la evaluación.
El Secretario de Educación del estado, José Luis González de La Vega Otero, informó ayer martes que de 4 mil 100 maestros notificados para la evaluación, 3 mil 14 entregaron sus documentos para el examen. Además, sostuvo que la presencia de las fuerzas federales estará “ceñida a los protocolos que establece la seguridad”, pero advirtió que “con mucha firmeza, digo que todo aquel que trasgreda la ley por supuesto tendrá que someterse a las consecuencias jurídicas que esto amerita”.
Los maestros que realizarán el examen en las instalaciones del Centro de Convenciones llegaron a los hoteles de lujo Princess y Fairmont Pierre Marqués, donde los precios en esta temporada baja de turismo oscilan en mil 779 pesos, mil 822 y mil 850 pesos por noche más los impuestos, de acuerdo con información colocada en los portales de los hoteles.
Se supo que en el hotel Fairmont Pierre Marques sólo estarían hospedados funcionarios y personal de apoyo de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Secretaría de Educación Guerrero (SEG).
Desde el martes, 6 mil policías federales y de la Gendarmería llegaron a Acapulco, para garantizar la seguridad de los maestros que sí aplicarán el examen, además de proteger la sede de la evaluación de desempeño, aplicada por el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), informó este miércoles la Policía Federal en un boletín.
En un recorrido, entre la 11:00 y 12:00 horas, se observaron puestos de vigilancia en las principales avenidas que van hacia la zona Diamante, lugar donde se encuentra la sede del examen. Los grupos de policías, instalados en los puestos de vigilancia, van de los 150 hasta los 400 elementos.
Desde la tarde del martes, la Policía Federal y Gendarmería mantienen retenes de vigilancia en la caseta de La Venta, de la Autopista del Sol; en la caseta de Metlapil del viaducto Diamante, se observaron seis autobuses repletos de las fuerzas federales, y en la entrada del Maxitúnel, del lado de Las Cruces.
Los puestos de vigilancia se observaron en la avenida Escénica, de Acapulco, a un costado de las instalaciones de la Octava Región Naval; en la carretera a Barra Vieja, en el aeropuerto internacional de Acapulco, donde había 150 federales; además del puesto de revisión ubicado sobre el bulevar de Las Naciones, a un costado del centro comercial La Isla, donde se colocaron vallas de contención de dos metros y medio para evitar el paso de manifestantes y se encuentran unos 350 policías federales.
Las fuerzas de seguridad también mantienen un resguardo y filtro en el Centro de Convenciones del Mundo Imperial, donde se observaron al menos 22 autobuses, entre el Mundo Imperial y el Centro de Rehabilitación Infantil Teletón, repletos de federales y una decena de patrullas, además de policías de Tránsito del estado.
En los hoteles que hospedarán a los maestros, se encuentran distribuidos unos 300 policías de la Gendarmería. En los accesos, personal de la SEG revisa de manera minuciosa la documentación de los maestros, que llegan desde las ocho regiones escolares a hospedarse, a quienes piden la credencial de elector.
Al frente del operativo policiaco se encuentra el comandante de la Policía Federal, José Luis López, conocido como Espartaco, y a quien se vio al mediodía en las barreras metálicas colocadas en el bulevar de las Naciones. Durante el día también se observó la llegada del comisario general de las Fuerzas Federales, Salvador Camacho Aguirre, quien supervisó los filtros instalados.
A las 13:00 horas, un observador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (Codehum) y un representante de la Fiscalía General del Estado (FGE), acompañados del notario número 12, Andrés Enrique Román, constataron que los elementos policiacos no portaran armas.
Durante la visita de los funcionarios, el jefe policiaco Espartaco explicó que los uniformados sólo traían escudos y material de dispersión, es decir gases lacrimógenos. El oficial mostró también una bocina de alta potencia, denominada TUM, que trae una grabación donde se invita a los manifestantes a no pasar las vallas de vigilancia, para evitar que la Policía Federal los disuada.
En los filtros, los policías federales manifestaron que la única “chinga” que tenían era estar todo el día parados. Mientras algunos estaban de guardia, otros más, incluido el oficial Espartaco, comieron en las fondas cercanas a los filtros, otros para mitigar el calor compraron helados y refrescos.