Con las elecciones presidenciales de Nicaragua a la vuelta, algunos líderes políticos alrededor del mundo han criticado que el ejercicio democrático es una «auténtica farsa», puesto que varios disidentes del régimen de Daniel Ortega, quien podría ser reelegido.
Bogotá, 3 de noviembre (EFE).– El copresidente de la Asamblea Parlamentaria Eurolatinoamérica (Eurolat), Javi López, calificó este miércoles las próximas elecciones presidenciales de Nicaragua como «una auténtica farsa» y criticó la «campaña de represión furibunda» que está en marcha en el país centroamericano.
«La democracia en Nicaragua está muriendo y es responsabilidad del régimen de [Daniel] Ortega«, aseguró López en declaraciones a Efe, y subrayó que las elecciones convocadas para el próximo domingo «son una auténtica farsa».
El europarlamentario socialista, que copresidió la reunión de dos días de la cúpula de Eurolat celebrada en Bogotá, rechazó «de plano», como Unión Europea, la «campaña de represión furibunda sobre la oposición del país» centroamericano.
??-? Celebramos Mesa Directiva de la Asamblea Parlamentaria Eurolatinoamericana Eurolat en el Congreso de Colombia en Bogotá. Ahora intervienen el V-Canciller de Colombia, la VP del Senado y la Presidenta de la Cámara de Representantes.
? En directo: https://t.co/vdgJVUYECi pic.twitter.com/IPP6EyRpvW
— Javi López (@javilopezEU) November 3, 2021
Este mismo martes, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, también se pronunció de la misma manera, hablando que los comicios son «completamente un ‘fake'» y de ellas no se puede esperar ningún «resultado legítimo».
«Hay elecciones que son completamente un ‘fake’. Allí no vamos a mandar ninguna misión de observación electoral porque el señor Ortega ya se encargó de encarcelar a todos los opositores políticos que se presentaban a las elecciones», afirmó Borrell durante un encuentro con medios en Perú, donde llegó el lunes en su primera visita a América Latina desde que asumió el cargo.
Nicaragua votará el domingo a su próximo Presidente donde todo indica que saldrá reelegido el sandinista Ortega, después de que la oposición política haya tenido que salir al exilio o ha sido detenida por la persecución política en marcha en el país.
Cristiana Chamorro, la aspirante a la Presidencia de Nicaragua que tenía mayor probabilidad de derrotar al actual mandatario, fue detenida por «traición a la patria» y presunto lavado de dinero y se encuentra en arresto domiciliario desde junio pasado e inhabilitada para participar en las elecciones a pedido del Ministerio Público, que dirige la exguerrillera sandinista Ana Julia Guido.
También quedaron fuera de la carrera electoral por arrestos e investigaciones legales impulsadas por el régimen de Ortega, Arturo Cruz, un exembajador de Nicaragua en Estados Unidos, arrestado a su regreso de un viaje a Washington; Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, el periodista Miguel Mora, el líder campesino Medardo Mairena y Noel Vidaurre.