Según indicó a Efe la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), entre el 1 de octubre de 2014 al 30 de septiembre pasado llegaron 43 mil 159 cubanos a Estados Unidos, mientras que durante todo el pasado año fiscal (de octubre de 2013 a septiembre de 2014) fueron 24 mil 278.

De acuerdo con CBP, estos inmigrantes llegaron a través de los cruces fronterizos con México, y también a través de otros puntos de entradas, entre ellos Miami y Tampa, en Florida; Búfalo, en Nueva York, y Seattle, en Washington.

La mayoría (30 mil 966) entró a través de la frontera sur con México, según las cifras de las oficinas de las autoridades fronterizas de El Paso y Laredo (Texas), Tucson (Arizona) y San Diego (California).

Por otro lado, a través del aeropuerto y puerto de Miami arribaron 9 mil 999, a los que se suman más de 4 mil que han sido interceptados este año en el Estrecho de Florida, el Caribe y el océano Atlántico por la Guardia Costera.

Desde octubre de 2014 hasta la fecha han intentado alcanzar las costas estadounidenses más de 4 mil 300 cubanos, mientras que durante todo el año fiscal anterior se reportaron 3 mil 677.

Estos últimos se acogen a la Ley de Ajuste Cubano de 1966 y su política de «pies secos/pies mojados» que establece que los cubanos que llegan a suelo estadounidense pueden quedarse, mientras que los interceptados en el mar, aunque sea a pocos metros de la orilla, son devueltos a Cuba.

Según expertos en inmigración este incremento continuará y obedece al temor de los cubanos a perder los beneficios migratorios tras la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, que comenzó en diciembre de 2014.

Jorge Duany, director del Instituto de Investigaciones Cubanas de la Universidad de Florida (FIU), explicó a Efe en declaraciones recientes que es una «tendencia que va a seguir aumentando definitivamente», y mediante el tránsito de otras áreas, especialmente la frontera con México.