El Canciller aseguró que México no cedió a las presiones de Donald Trump para contener la migración, y que las declaraciones de Kushner fueron hechas únicamente para ganar votos para las próximas elecciones en Estados Unidos.
Ciudad de México, 3 de agosto (SinEmbargo).– El Canciller Marcelo Ebrard negó que el Gobierno mexicano cediera a presiones de la administración de Donald Trump para dar inicio a la implementación de los Protocolos de Protección de Migrantes (PPM) conocidos como “Quédate en México”, como aseguró Jared Kushner, yerno del expresidente estadounidense en su nuevo libro.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) opinó que las declaraciones de Kushner fueron hechas únicamente para ganar votos para las próximas elecciones en Estados Unidos.
El yerno del expresidente republicano aseguró en su libro de memorias, titulado Rompiendo la Historia, que México cedió a la presión del Gobierno estadounidense a imponer aranceles y cancelar el Tratado de Libre Comercio.
«Mira, están en campaña ¿sí? Son documentos hechos para ganar votos», dijo al respecto el Canciller al ser entrevistado durante la presentación del libro La Tabla de los Elementos.
«Lo que quería el Gobierno de Trump era que México aceptara el tercer país seguro, eso es lo que quería; solo basta con revisar lo que fue el debate en esa época, y México les dijo que no», sostuvo. «México nunca concedió el ser un tercer país seguro, ser un tercer país seguro es un tratado. Llegamos a un consenso en el Senado de la República con todos los partidos, yo estuve ahí, y les dijimos: eso no lo vamos a admitir».
Kushner aseguró en su libro que en el 2019, el Gobierno de Donald Trump amenazó a la administración de Andrés Manuel López Obrador con subir los aranceles un cinco por ciento si no se tomaban acciones para contener la migración, lo que resultó en un despliegue de más de 25 mil elementos de la Guardia Nacional a las fronteras norte y sur de México.
Cuestionado si esta militarización de la frontera se generó para contener a las personas migrantes, como un ejemplo de haber cedido a las presiones estadounidenses, el Canciller respondió: «Pero no es a lo que se refiere. Lo que ellos querían era el tercer país seguro».