El proceso electoral de este año no está en peligro, pero seguirá manchado de sangre y la violencia afectará en mediano y largo plazo a la democracia mexicana, alertan expertos consultados por SinEmbargo.
“En las elecciones es un hecho que aflora más la violencia, sobre todo porque la delincuencia organizada puede imponer candidatos; y puede, con su dinero, hacer lo necesario para que gane un candidato […]. Es muy grave. Este fenómeno se pudo haber detenido hace mucho tiempo, pero tenemos una clase política rapaz”, dijo Virgilio Bravo Peralta, director del Centro de Negociación, Mediación, Conciliación y Arbitraje (CENCA).
De acuerdo con el “Primer Informe de Violencia Política en México 2018”, realizado por la consultora de análisis de riesgo Etellekt Consultores, entre el 8 de septiembre de 2017 y el 6 de febrero de 2018 se han registrado en México 83 agresiones en contra de políticos de todo el país.
Ciudad de México, 3 de marzo (SinEmbargo).- El Estado mexicano no podrá frenar el asesinato de candidatos a un puesto de elección popular en el proceso electoral en marcha y durante los cuatro meses que restan para las elecciones del 1 de julio, el crimen organizado seguirá matando a los aspirantes, dijeron analistas consultados por SinEmbargo.
El proceso electoral, coincidieron, no está en peligro, pero seguirá manchado de sangre y la violencia afectará en mediano y largo plazo a la democracia mexicana, alertaron.
“La violencia en este país esa a punto de salirse de control. Estamos a punto de perder el control, sobre todo por el fenómeno de la delincuencia organizada donde hay zonas en donde quienes gobiernan, si se puede decir así, es la delincuencia organizada. La violencia difícilmente cesará, porque la delincuencia atraviesa a las instituciones no sólo policiacas, sino a las políticas. Es un fenómeno que si no se contiene, irá ganando mayor terreno”, dijo Virgilio Bravo Peralta, director del Centro de Negociación, Mediación, Conciliación y Arbitraje (CENCA) del Instituto Internacional de Estudios de Derecho y Jurisprudencia.
Para el experto es tarde para contener la violencia en el proceso electoral, debido a que no existen los recursos necesarios para proteger a cada uno de los candidatos.
Tendría que asignársele, explicó, escoltas a cada uno de los candidatos, lo que resulta materialmente imposible en la elección más concurrida de la historia, en donde se renovarán 3 mil 226 cargos de elección popular.
“En las elecciones es un hecho que aflora más la violencia, sobre todo porque la delincuencia organizada puede imponer candidatos; y puede, con su dinero, hacer lo necesario para que gane un candidato […]. Es muy grave. Este fenómeno se pudo haber detenido hace mucho tiempo, pero tenemos una clase política rapaz, envilecida hasta los huesos, todos, que únicamente van a actuar cuando existe un clamor popular”, dijo.
De acuerdo con el “Primer Informe de Violencia Política en México 2018”, realizado por la consultora de análisis de riesgo Etellekt Consultores, entre el 8 de septiembre de 2017 y el 6 de febrero de 2018 se han registrado en México 83 agresiones en contra de políticos de todo el país, y de esos 54 terminaron en asesinato de “alcaldes en funciones, ex alcaldes, regidores y precandidatos en el ámbito local”.
El estudio indica que de esos 54 asesinados, 15 eran precandidatos a un alcaldía. Los datos no recogen los crímenes cometidos durante casi todo el mes de febrero y los primeros días de marzo en donde han sido asesinados candidatos en Puebla y en Guerrero.
Los estados más cruentos son Guerrero, Veracruz, Oaxaca, Puebla y Estado de México, de acuerdo con los datos arrojados por el análisis de la consultora.
Apenas este sábado el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido de la Revolución Democrática (PRD) condenó el asesinato de Homero Bravo Espino, aspirante a la Alcaldía de Zihuataenejo, Guerrero y Coordinador de Obras Públicas y Desarrollo Urbano en el ayuntamiento, quien fue asesinado el viernes por la noche.
“Es inaceptable que a días del asesinato de nuestra compañera militante Antonia Jaimes Moctezuma los crímenes y violencia en el estado continúen y se sigan dando contra miembros de nuestro partido.En el PRD, reprochamos la falta de atención a todos estos hechos que se presentan en la entidad más violenta del país, Guerrero es un baño de sangre y no nos quedaremos con los brazos cruzados ante éste ni ningún asesinato. Exigimos una investigación a fondo, que se esclarezcan los hechos, que se dé con los responsables”, exigió el CEN en un comunicado.
Jaime Moctezuma, era precandidata a una diputación en Chilapa, Guerrero y fue asesinada el 21 de febrero al interior de un restaurante de su propiedad.
“El CEN del PRD demanda respuesta inmediata de parte del gobierno federal, estatal y municipal, exigimos que la investigación no quede impune. Al gobierno estatal de Héctor Astudillo le exigimos de manera puntual que actúe y no muestre indiferencia ante la ola de violencia por la que atraviesa el estado, no se trata de poner seguridad a cada aspirante, sino que se ponga principal atención a las zonas de mayor riesgo de acuerdo al mapa que él mismo supuestamente ya entregó a los presidentes del INE [Instituto Nacional Electoral] y del IEPC[Instituto Electoral y de Participación Ciudadana]”, dicen el comunicado.
Pero el asesinato a candidatos no distingue colores: el 24 de febrero fue asesinada en Guerrero Dulce Nayeli Rebaja Pedro, aspirante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a Diputada local en el Distrito 25, y su primo, el policía estatal Crescencio Rebaja Bello.
En Puebla fue asesinato el 1 de marzo Aarón Varela Martínez, precandidato del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a la Alcaldía por el Municipio de Santa Clara Ocoyucan.
DEMOCRACIA MEXICANA EN PELIGRO
El especialista Virgilio Bravo alertó que la democracia mexicana se verá afectada, pues hay candidatos que ni siquiera pueden llegar a la boleta electoral y aspirar a ser votados, porque son asesinados o amenazados para desistir. Y por el contrario, hay aspirantes que son apoyados por los criminales y que llegan a una alcaldía y hasta gubernatura con un “pie en el crimen organizado”.
“El crimen organizado esta trabajando, está matando a los candidatos y claro que afecta a la democracia a mediano y largo plazo, porque finalmente alguno de los candidatos que van a ganar diputaciones locales, gobernadores, van a tener un pie en la delincuencia organizada o estarán aliados a algún cartel y eso va a generar mayor violencia con los otros carteles”, explicó.
José Antonio Crespo Mendoza, politólogo del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), coincidió con Bravo Peralta y explicó que el proceso electoral como tal no peligra, pero sí la democracia.
“El proceso como tal no. Los candidatos a una alcaldía es en los que se fija el crimen organizado y cuando un candidato no les gusta, porque saben que no van a poder negociar con él, lo mata. No entorpecen ni la organización, ni el hecho de que la gente vaya a votar, ni hacen nada el día d ellas elecciones, pero los que sí están en peligro son los candidatos a alcaldes”, indicó.
Y agregó: “afecta a la democracia porque si un candidato no puede tener seguridad, están desviando el voto ciudadano. Le están quintando esas opciones por vía de la muerte, o el hecho mismo de que no se pueda sentir seguro”.
Crespo Mendoza afirmó que los candidatos en lo que resta del proceso electoral, tendrán que lidiar con la violencia, porque el Estado no podrá hacer nada.
“No pudo hacerlo en seis años; en los tres meses que quedan no va a poder hacer nada. La violencia está creciendo en todos los indicadores y quién sabe qué pase durante el próximo sexenio, gane quien gane”, dijo.
ADEMÁS
Alejandro Guillén Reyes, doctor en Ciencia Política e investigador de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), recordó que el asesinato de candidatos no es un tema nuevo, pues desde hace años los alcaldes en funciones han sido víctimas del crimen organizado.
“Si nos vamos más para atrás vamos a ver a muchos alcaldes, sobre todo de alcaldías alejadas de las zonas más pobladas en donde se está viendo que es más común la violencia del crimen organizado”, explicó.
A finales de diciembre del año pasado, Enrique Vargas del Villar, presidente de la Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC) y Alcalde de Huixquilucan, Estado de México por el Partido Acción Nacional (PAN), dijo en entrevista a este medio que durante los cinco años de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto el número de asesinatos de presidentes municipales superó a todo el sexenio de su antecesor en el cargo, Felipe Calderón Hinojosa.
Hasta diciembre fueron asesinados 60 presidentes municipales; de los cuales 33 habían dejado el puesto, 22 estaban funciones y cinco fueron electos y esperaban tomar el cargo.
Durante la gestión de Felipe Calderón fueron asesinados 49 de estos funcionarios; de los cuales 16 eran ex alcaldes, 29 estaban en funciones y cuatro recién habían sido electos.
De hecho 2017 cerro como el año más cruento con 19 alcaldes asesinados, cifra que superó a los que fueron ultimados en 2010 y 2011, los años más violentos de la guerra contra el narcotráfico.
“Me parece importante decir, que no se le debe dejar toda la seguridad al Gobierno federal, se debe compartir responsabilidad tanto presidentes municipales, sobre todo gobernadores. Todas las instituciones del Estado, desde la Presidencia de la República, junto con los gobiernos estatales y las instituciones en los estados encargados del tema de la seguridad deben garantizar un proceso electoral sin violencia. No me atrevo a decir que será una elección con violencia generalizada, pero sí que tenemos focos rojos que indican que se tienen que redoblar esfuerzos”, argumentó.
Para Guillén Reyes el Estado aún tiene algún margen de maniobra para garantizar la paz durante el proceso electoral, pero debe esforzarse.
“Si no se atiende esto y no se hace algo más de lo que hasta el momento se ha hecho, es probable que el día de la jornada electoral se corran riesgos”, explicó.