Alumnos de la UNAM se concentran en perfeccionar un humanoide programado para competencias nacionales e internacionales de futbol entre robots autónomos.
Ciudad de México, 3 de enero (SinEmbargo).- Alumnos del posgrado de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) perfeccionan el funcionamiento, rendimiento y habilidades de NimbRo-OP, un humanoide programado para competencias nacionales e internacionales de futbol entre robots autónomos.
Pablo Monroy Llaguno, Luis Sergio Durán Arenas y Lauro Fernando Vázquez Alberto son los alumnos que se han encargado de mejorar la agilidad y percepción del robot. Los especialistas en Inteligencia Artificial, Procesamiento Digital de Imágenes y Visión Computacional, y en Ingeniería Eléctrica-Control, trabajan en el Laboratorio de Biorobótica de la UNAM.
El robot, llamado comúnmente Nimbro, fue adquirido de la Universidad de Bonn, Alemania. En enero de 2014 llegó a las instalaciones de la universidad y ha sido compartido con otras instituciones educativas como el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey campus Estado de México y La Salle.
Con Nimbro, que puede ser programado para resolver problemas con distintas metodologías, es posible participar en la competencia RoboCup, en la categoría Humanoide Soccer. El desafió del encuentro se basa en la percepción del entorno y la pelota con el uso de sensores que pueden homologarse a los de una persona, además de diferenciar los momentos cuando estén de pie o en el piso, ubiquen porterías y se alineen para disparar al arco. Todo esto mientras caminan y mantienen el balance.
El humanoide ya ha participado dos veces en el Torneo Mexicano de Robótica. Debutó en 2014 en Ciudad del Carmen, Campeche, y al siguiente año se presentó en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, donde mostró nuevos comportamientos y movimientos para jugar sobre pasto artificial y usó nuevos algoritmos para la detección de pelota y portería.
El cuerpo de Nimbro está compuesto de aluminio y fibra de carbono y cuenta con una tarjeta de control conectada a la computadora que tiene la función de comunicar posiciones o comandos entre los servomotores y la computadora.
También está dotado de una pequeña máquina donde corre el sistema operativo y programas que realizan diferentes funciones para tener percepción de su estado y del entorno. Además, la cámara colocada en su cabeza, tiene una lente gran angular que cubre casi 180 grados, lo que permite ver más elementos de los alrededores.
En tanto, el ingeniero Vázquez Alberto explicó que el control, enfocado a la dinámica, movimientos e interacción con el medio ambiente, analiza perturbaciones del terreno y hace posible que el humanoide se desplace sobre diversas superficies.
Los trabajos con Nimbro sirven como base de tesis de maestría del equipo universitario. Durán Arenas se enfoca a la visión estereoscópica, mientras que Monroy Llaguno al aprendizaje mediante técnicas de inteligencia artificial, y Vázquez Alberto al control de movimientos por modos deslizantes.
Se busca preparar a Nimbro para la próxima competencia nacional y la RoboCup, que se llevará a cabo en julio de 2016 en Alemania.
