En la cinta, Megan acepta un trabajo en la morgue como parte de un proceso de rehabilitación. Tras la reciente muerte de su amigo policía y de la separación con su novio, la protagonista acepta el trabajo aunque esto implique que pase sus noches entre cadáveres.
«A pesar de todo por lo que ha pasado, logra levantarse y demostrarse a sí misma que puede controlarlo”, dijo la actriz acerca de su personaje.
Por Berenice Bautista
Ciudad de México, 2 de diciembre (AP).- En la película de terror Cadáver (The Possession of Hannah Grace) la actriz canadiense Shay Mitchell interpreta a una ex policía alcohólica que entra a trabajar en el horario nocturno de la morgue de Boston, donde ocurren sucesos paranormales con la llegada del cuerpo de una chica llamada Hanna Grace. Por momentos es difícil saber qué es más aterrador para ella, si sus demonios internos o los que acompañan a ese cadáver.
“Definitivamente sus demonios internos, esos nunca se van. Hay momentos en los que Hanna Grace no estaba enfrente de ella y los demonios internos siempre están ahí”, dijo Mitchell en una entrevista reciente con The Associated Press a propósito del estreno de la cinta de Diederik Van Rooijen este fin de semana en México y Estados Unidos.
Megan, la policía interpretada por Mitchell, acepta el trabajo en la morgue como parte de su proceso de rehabilitación, pero lleva consigo la memoria de un amigo policía muerto durante un operativo y también la reciente separación de su novio. Sin embargo, está decidida a aprovechar la oportunidad de trabajar a pesar de que implique estar sola entre cadáveres.
“Las mujeres son rudas y realmente nos tienen que hacer muchas cosas malas para que no logremos levantarnos una vez más”, dijo la también actriz de la serie Pretty Little Liars. “Creo que eso está muy claro con el personaje de Megan, a pesar de todo por lo que ha pasado, logra levantarse y demostrarse a sí misma que puede controlarlo”.
En su caso, la misma Mitchell buscó superar sus miedos al internarse en una morgue de verdad para preparar su papel, pues quería sentir las energías, conocer cómo huele y cómo funciona este lugar.
“Tenía que llegar a un nivel en el que estuviera cómoda”, dijo. “Ella es una policía así que ir a la morgue no le hace sentir lo mismo que a mí, por ejemplo”.
Megan está bastante tranquila registrando los datos de los cadáveres que recibe hasta que llega Grace, una joven que murió en un exorcismo. Mitchell dijo creer en las energías más allá de la muerte, aunque de una manera positiva.
“Sólo he tenido buenas experiencias. Mi abuelo y mi abuela están cerca de mí todo el tiempo”, apuntó.