Estados Unidos exporta este combustible, alto en carbono y azufre, a más de 30 países. Expertos afirman que el «petcoke» es un desecho del que las refinerías se tienen que deshacer y su empleo además de contribuir al calentamiento global provoca enfermedades.
Nueva Delhi, 2 de diciembre (AP).- Las refinerías estadounidenses que no pueden vender en el país un subproducto sucio de combustible están exportando grandes cantidades a India.
El coque de petróleo, deshecho del refinado de arenas de petróleo de Canadá y otro crudo pesado, es más barato y alcanza temperaturas más altas que el carbón, pero contiene más carbono, que contribuye al calentamiento global, y mucho más azufre, dañino para los pulmones y el corazón, una razón clave por la que pocas compañías estadounidenses lo usan.
Entonces las refinerías están enviado el producto a otros países, especialmente a India, que el año pasado recibió casi una cuarta parte del «petcoke» de grado de combustible que exporta Estados Unidos, concluyó una investigación de The Associated Press. En 2016, Estados Unidos envió más de 8 millones de toneladas métricas de petcoke a India -unas 20 veces más que en 2010.
El petcoke usado en numerosas fábricas y plantas está contribuyendo a una contaminación sumamente peligrosa del aire en el país asiático.
El residente Satye Bir dice que no sabe por qué el aire en Nueva Delhi es tan sucio, pero siente una mezcla de furia y resignación. «Mi vida acabó… Mis pulmones están acabados», dijo Bir, de 63 años, mientras agarra entre resuellos un inhalador. «Así sobrevivo. De lo contrario no puedo respirar».
Análisis de petcoke importado usado cerca de la capital encontraron 17 veces más azufre que el límite para el carbón, de acuerdo con la Autoridad de Control de Polución Ambiental de India. El petcoke generado por el país contribuye también a la contaminación.
Funcionarios de la industria dicen que el petcoke ha sido un combustible importante durante décadas y que su uso recicla un producto de desecho.
Activistas ambientales y de salud dicen que Estados Unidos está exportando un problema ambiental. Estados Unidos es el mayor productor y exportador de coque de petróleo en el mundo.
«No debemos convertirnos en el basurero del mundo», dijo suní Narain, miembro de la Autoridad de Polución que encabeza el Centro de Ciencia y Ambiente. «Ya nos estamos asfixiando».
El refinado de crudo es vital en el corazón industrial de Estados Unidos. En el noroeste de Indiana, una refinería y una planta siderúrgica dominan la orilla del Lago Michigan y las chimeneas siguen simbolizando oportunidades.
Los empleados celebraron cuando la refinería BP Whiting invirtió 4 mil 300 millones de dólares para procesar el crudo extraído de las arenas petroleras de Canadá.
Decenas de refinerías estadounidenses construyeron unidades llamadas «cokers» para procesar el crudo pesado y producir derivados, pero generan enormes cantidades de petcoke.
La Asociación de Productores Petroleros y Petroquímicos de Estados Unidos dijo a la AP que las cokers «le permiten al país exportar coque de petróleo a más de 30 países para satisfacer una creciente demanda», pero los expertos dicen que no son las fuerzas del mercado lo que impulsa a las refinerías estadounidenses a vender su subproducto. Dicen que las refinerías tienen que deshacerse del coke y lo venden a descuento.
El petcoke se vende en todo el mundo. Entre los mayores comerciantes están Oxbow Energy Solutions y Koch Carbon, encabezada por miembros de la familia Koch, de gran influencia política entre los conservadores.
Ni ellos ni una decena de compañías petroleras y comerciantes contactados por la AP respondieron a preguntas sobre el petcoke. Argumentaron la existencia de controversias previas sobre el almacenamiento de desechos en refinerías en el centro del país o no querían enfurecer a socios de negocios.
En India, ningún administrador de las fábricas dio acceso a la AP y funcionarios federales no respondieron a pedidos de entrevistas.
El coque, dicen los críticos, está empeorado una situación ya mala en India.
Unos 1.1 millones de indios mueren prematuramente como resultado de la contaminación del aire cada año, de acuerdo con Health Effects Institute, una organización sin fines de lucro.
«Cincuenta por ciento de los niños en Nueva Delhi tienen anormalidades en su funcionamiento pulmonar, asma, bronquitis, tos espasmódica recurrente. Eso es 2.2 millones de niños», dijo el doctor Sai Kiran Chaudhuri, jefe del departamento pulmonar del Instituto Cardiaco y Pulmonar de Delhi.