Mediante esta nueva forma de ver las producciones esta plataforma gratuita utiliza escenas específicas para ejemplificar todas las formas de violencia doméstica previstas por la ley en Brasil (sicológica, patrimonial, moral, sexual y física).
Por María Angélica Troncoso
Río de Janeiro, 2 de septiembre (EFE).- Una mujer es asesinada cada dos horas en Brasil y agredida en sus propias casas cada dos minutos. Para ayudar a frenar la lacra de la violencia machista, una ONG creó una plataforma de streaming similar a Netflix que exhibe clásicos del cine y la televisión para ayudar a identificar agresiones.
Filmes que rompieron taquilla como Titanic, Pulp fiction o Lo que el viento se llevó y series ganadoras como The mad men, Escándalo u Orange is the new black forman parte del repertorio que ofrece la plataforma 180play para ayudar a las mujeres víctimas de la violencia machista.
Mediante esta nueva forma de ver las producciones -que también incluye novelas- esta plataforma gratuita utiliza escenas específicas para ejemplificar todas las formas de violencia doméstica previstas por la ley en Brasil (sicológica, patrimonial, moral, sexual y física).
Pese a que miles de personas en Brasil son víctimas de actos violentos en el interior de sus hogares todos los días, no siempre son capaces de identificarlos.
Por eso, el objetivo de esta plataforma, que tiene el auspicio de ONU Mujeres y fue lanzada para conmemorar los 14 años de entrada en vigor de la Ley María da Penha, que castiga la violencia contra las mujeres en Brasil, es que se puedan identificar fácilmente los diferentes tipos de agresión y que se sepa que cualquiera de ellos puede ser denunciado ante las autoridades.
La plataforma es el eje de una campaña publicitaria, ideada por la agencia F.biz a petición del Instituto María da Penha, que aprovechó el alto consumo que se tiene en la actualidad de material audiovisual vía streaming para mostrar de forma didáctica escenas de un sinnúmero de producciones que contienen diversos tipos de violencia.
«Sabemos que la ley María da Penha es conocida en todo el territorio brasileño por el 100 % de las personas e incluso en regiones ribereñas del Amazonas, pero el 68 % no conoce los derechos de la norma y no entiende lo que la ley puede hacer por las mujeres», señaló a EFE Conceiçao de María Méndes de Andrade, cofundadora del Instituto María da Penha.
Esta organización no gubernamental fundada en 2009 tiene como misión enfrentar, a través de mecanismos de sensibilización y empoderamiento, la violencia doméstica y familiar contra las mujeres.
«Si la mujer tiene conocimiento de los tipos de violencia, ella detecta con más facilidad la relación abusiva o la situación de violencia que le está sucediendo y que hasta el momento no ha sido capaz de identificar justamente por estar dentro del círculo de la violencia», agregó.
Según Méndes, la mayoría de las personas cree que violencia machista es sinónimo de violencia física y que solo esta es la que se puede denunciar, pero lo cierto es que la agresión sicológica o la patrimonial la anteceden.
LOS CASOS CRECEN
La ley María da Penha lleva el nombre de la mujer que sobrevivió a dos intentos de asesinato por parte de su marido en la década de los 80 y que por su incansable lucha, que duró más de 19 años, dio origen a la normativa.
Tras ser creada el 7 de agosto de 2006, la ley entró en vigor el 22 de septiembre del mismo año y es considerada por las Naciones Unidas como una de las tres más avanzadas del mundo en la defensa de los derechos de las mujeres.
No obstante, las agresiones contra las mujeres en el país sudamericano continúan y se han incrementado durante la pandemia en Brasil, el país que registra el mayor número de feminicidios de América Latina.
Según el Atlas de la Violencia 2020, un total de 4 mil 519 mujeres fueron asesinadas en 2018, una cada dos horas.
La situación no mejora para los casos de violencia machista pues en ese mismo año se registraron 263 mil 067 casos de maltrato físico a mujeres en sus hogares, lo que se traduce en una agresión cada dos minutos.
Con el inicio de las restricciones a la movilidad en Brasil por el nuevo coronavirus la cifras crecieron.
Un informe especial sobre la violencia machista durante la pandemia elaborado por el Foro Brasileño de Seguridad Pública reveló que las peleas entre parejas en el gigante suramericano aumentaron un 431 por ciento desde que empezó el confinamiento social para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
El informe se basó en los relatos divulgados por vecinos y familiares a través de Twitter y, pese a que el aumento de los casos relatados fue alarmante, las denuncias formales ante las autoridades cayeron por las mismas condiciones de aislamiento requeridas para enfrentar la COVID-19.
Las cifras oficiales lo corroboran, pues mientras las denuncias presenciales se redujeron, las telefónicas aumentaron un 17,97 por ciento durante los nueve días siguientes a la fecha en la que comenzó a hacerse efectivo el confinamiento social en varios estados, según datos del Ministerio de la Mujer, la Familia y los Derechos Humanos.
Y en Río de Janeiro, una de las regiones que más registra este tipo de agresiones -en 2019 más de 128 mil mujeres fueron víctimas de violencia machista-, los pedidos por medidas de restricción aumentaron un 50 por ciento.
De ese total, fueron víctimas de violencia física el 33 por ciento, de violencia sexual el 5,2 por ciento, psicológica el 32.3 por ciento, moral el 24.8 por ciento y patrimonial el 4,6 por ciento.