El fin de semana pasado, una ola de violencia aquejó a prácticamente todo el país, en particular a los estados de Guerrero, Michoacán, Estado de México, Guanajuato, Tamaulipas, Veracruz, Zacatecas y la Ciudad de México; la suma de crímenes dejó más de 70 ejecutados, descuartizados y calcinados, en lo que fue una de las jornadas más violentas desde el sexenio de Felipe Calderón.
Ciudad de México, 1 de agosto (SinEmbargo).– El fin de semana pasado se registró una oleada de violencia y crimen a lo largo de la República Mexicana. En Guerrero hubo al menos 19 ejecuciones; en Michoacán se reportaron 10 calcinados; en el Estado de México se registraron siete muertes violentas en diferentes hechos; en Guanajuato, las autoridades confirmaron seis homicidios; en Tamaulipas, tres hombres fueron asesinados en un bar; en la Ciudad de México se reportaron cuatro muertos, entre ellos tres descuartizados; en Veracruz, al menos siete personas fueron ejecutadas, y en Zacatecas, la policía registró el homicidio de tres personas.
Es una de las jornadas más violentas en el país durante la administración del Presidente Enrique Peña Nieto, y la mayoría de los casos se relacionaron con la delincuencia organizada. De esta forma, políticos y analistas han lanzado de nuevo la pregunta de hacia dónde va el país con una estrategia de seguridad que no ha dado resultados, y en cambio ha provocado una mayor incidencia en los delitos.
SinEmbargo salió a las calles a preguntar a los habitantes de la Ciudad de México qué opinan respecto a la ola de violencia en el país y sobre la actuación de los gobiernos federal y local para contenerla.