El delantero argentino fue recibido por gritos que demandaban que devolviera el dinero que presuntamente le escondió al fisco.
Barcelona, 2 jun (dpa) – El futbolista argentino Lionel Messi llegó hoy a la Audiencia de Barcelona, donde está siendo juzgado por presunto fraude fiscal a la Hacienda española, en medio de una tremenda expectación mediática.
Unos 250 periodistas de todo el mundo aguardaban al astro del Barcelona, que hoy, en el tercer día de vista oral, declarará ante el juez, acusado de haber evadido al fisco español 4.1 millones de euros (unos 4.5 millones de euros) entre 2007 y 2009.
Messi arribó al juzgado de la capital catalana acompañado de su padre, Jorge, acusado también como responsable de las finanzas de la estrella de la selección argentina, y de algunos de sus colaboradores más estrechos en Barcelona y Argentina.
Vestido con traje negro, camisa blanca y corbata, con semblante serio y barba de cuatro días, Messi subió las escaleras de la Audiencia erguido, sin síntomas visibles del golpe que sufrió la semana pasada en su último amistoso con la selección argentina.
«¡Tío bueno!», le gritó una aficionada desde los aledaños del tribunal, donde se concentraron un puñado de curiosos.
Antes de entrar en la sala para sentarse en el banquillo de los acusados, el cinco veces Balón de Oro también pudo escuchar cómo otro vociferó: «¡Vete a jugar a Panamá!».
«¡Devolvé la plata!», añadió otro. Messi ya pagó a la Hacienda española todo el montante que supuestamente defraudó entre 2007 y 2009, además de unos 10 millones de euros más para regularizar sus declaraciones de renta de años posteriores.
Pese a ello, el astro del Barcelona y de la selección argentina se enfrenta, como su padre, a una posible pena de 22 meses y 15 días de cárcel, que no los obligaría a entrar en prisión al no superar los dos años de condena y no tener antecedentes penales.
Las testigos que declararon en las dos sesiones anteriores del juicio contra los Messi coincidieron en eximir al futbolista de culpa al señalar que el astro azulgrana no estaba al corriente de cómo se gestionaban ni los ingresos por sus derechos de imagen ni su patrimonio y que era su padre quien llevaba todo el control.
Por su parte, Messi se desligó hoy de cualquier responsabilidad en el fraude fiscal por el que se le juzga en España al asegurar que él nunca tuvo «ni idea» de cómo se gestionaba su patrimonio porque confiaba en su padre y en sus asesores.
«Yo no sabía nada, como explicó antes mi papá; me dedicaba a jugar al fútbol, confiaba en los abogados que nos llevaban las cosas y no tenía idea de nada», afirmó el cinco veces Balón de Oro tras más de tres horas de espera sentado en el banco de los acusados para poder explicarse ante la Audiencia de Barcelona, el tribunal que dirimirá la causa.