De acuerdo con la OCDE, las presiones inflacionarias seguirán latentes en el mundo, por lo que lo mejor que pueden hacer los bancos centrales es esperar a que las tensiones de oferta disminuyan y «actúen si es necesario». «Si persisten las limitaciones de la oferta, mientras que el PIB y el empleo continúan creciendo rápidamente y fomentan aumentos más amplios de los precios, una mayor presión inflacionaria podría durar más tiempo», advirtió.
Madrid, 1 de diciembre (Europa Press) – En 2022 las dos principales economías de la región de América Latina, México y Brasil, experimentarán crecimientos del 3.3 por ciento y del 1.4 por ciento, respectivamente, aseguró la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Sin embargo, sendas economías se enfrentan a incrementos significativos en la inflación durante 2021. En el caso de México, los precios crecerían un 5.6 por ciento en 2021, mientras que en Brasil repuntarían hasta un 7.8 por ciento.
La OCDE maneja dos escenarios diferentes en los dos países. Las previsiones de inflación para 2022 son del 5.1 por ciento en Brasil y del 4.4 por ciento en México.
Así, en México contempla que la inflación se reduzca progresivamente tras el fuerte repunte de este año, aunque ha advertido que la política monetaria debería endurecerse más si el aumento de precios no converge al objetivo del 3 por ciento.
La organización también apuntó que la proyección de expansión de la economía es de un 3.3 por ciento en 2022 y un 2.5 por ciento en 2023. «Con una proporción creciente de la población vacunada y la mejora del mercado laboral, el consumo interno será un motor clave del crecimiento», señaló.
En Brasil, el organismo cree que la posición de política monetaria del Banco Central, que en los últimos meses ha incrementado los tipos hasta el 7.75 por ciento, se mantendrá durante 2022 e incluso más tiempo para frenar las presiones sobre los precios y mantener las expectativas de inflación ancladas.
La OCDE ha apuntado que en Brasil las reformas fiscales pueden jugar un rol importante en la contención de presiones inflacionarias.
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COLOMBIA, COSTA RICA Y CHILE CRECERÁN
Colombia será la economía latinoamericana que más crezca en 2022, con una expansión del Producto Interno Bruto (PIB) del 5.5 por ciento, según el último informe de perspectivas macroeconómicas elaborado por la OCDE.
Tras alcanzar los niveles precrisis en el tercer trimestre de 2021, se espera que la economía colombiana crezca un 9.5 por ciento en 2021, frente a la contracción del 6.8 por ciento experimentada un año antes. El consumo privado es el principal impulsor de la recuperación. En términos de empleo se observan recuperaciones, pero a un ritmo más lento que el de la recuperación económica.
El segundo país de la región que más crecerá en 2022 será Costa Rica, con una variación al alza del 3.9 por ciento. En este caso, el impulso de la actividad proviene en buena parte por la fuerte demanda externa, así como por la recuperación gradual del turismo. El país centroamericano contará con el apoyo de la inversión privada, que se recuperará con fuerza. Asimismo, se observará un incremento de la inflación moderado y por debajo de la tasa objetivo del 3 por ciento.
NEW @OECD #GDP 2022 Forecast
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— Anthony Gooch Gálvez (@pitres) December 1, 2021
En tercer lugar, la OCDE proyecta que Chile sea la tercera economía en términos de crecimiento en 2022, con una expansión del PIB del 3.5 por ciento. La economía del país andino se ha visto beneficiada por una sólida campaña de vacunación, el despliegue de grandes paquetes de estímulos fiscales, unos altos precios en las materias primas y la retirada de los fondos de pensiones privados.
En este contexto, Chile crecerá hasta un 12 por ciento interanual en 2021, para pasar a un ritmo menor del 3.5 por ciento en 2022 y del 2 por ciento en 2023. El organismo prevé que la inflación se ubique en un nivel del 4.3 por ciento este año, para acelerarse hasta el 5.4 por ciento en 2022 y volver a un nivel del 3.2 por ciento en 2022.
ARGENTINA: 40 POR CIENTO EN SITUACIÓN DE POBREZA
El organismo proyecta en Argentina un crecimiento del 2.5 por ciento en 2022, tras un crecimiento del 8 por ciento en 2021. Sin embargo, la OCDE ha advertido de que tras la pandemia los niveles de pobreza han alcanzado a un 40 por ciento de la población.
El país sudamericano se enfrenta a un escenario de hiperinflación, con unas reservas en moneda extranjeras mermadas por la pandemia y altas tasas de informalidad laboral.
Les tensions inflationnistes s’avèrent + fortes que prévu.
Selon les #PerspectivesEconomiques, si de de nouvelles vagues de contaminations #COVID19 perturbaient encore + l’offre, elles pourraient provoquer une prolongation des tensions inflationnistes ⤵️https://t.co/QXSUrc1nKj pic.twitter.com/HCJRxnrm8I
— OCDE (@OCDE_fr) December 1, 2021
En este sentido, la OCDE considera que un ajuste fiscal significativo sigue siendo un factor clave para Argentina. Asimismo, la eficiencia del gasto público podría mejorarse, según el organismo, incluso reduciendo el empleo público y los subsidios, al tiempo que se preservan los gastos sociales «bien focalizados».
En el plano de la política monetaria, la OCDE recomienda la adopción de medidas más decisivas para reducir la inflación, que afecta de manera «desproporcionada» a los hogares de bajos ingresos.
