En México, tanto la vida como la muerte, tiene sus peculiaridades. Expertos interpretan las causas de mortalidad que prevalecen dentro de la sociedad.
Ciudad de México, 1 de noviembre (SinEmbargo).– Nadie sabe qué sigue después de la muerte, pero los expertos están seguros de que las causas que conducen a ella son un fiel reflejo de lo que sucede en el país. El fin del camino para los mexicanos, más allá de los hábitos personales, habla de las condiciones de vida, de los servicios de salud y hasta de los productos que más consume la sociedad.
De los 34 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México está entre los tres que menos recursos destinan a salud. Tan sólo el 6.2 por ciento de su Producto Interno Bruto. Una inversión modesta, que sólo pone al país por encima de Turquía y Estonia. Y lo deja lejos del promedio de la organización, de 9.5 por ciento.
Otro indicador, la esperanza de vida, revela que al nacer en este país las personas llegan a tener en promedio 74.5 años (dato del 2013), mientras que el promedio de los países de la OCDE es de 80.
Al igual que en el resto del mundo, la principal causa de muerte en México son las enfermedades cardiovasculares (ECV). Tan sólo en el 2013 hubo 113 mil fallecimientos, sin considerar el paro cardíaco, refieren los datos oficiales. Esto representa el 18 por ciento del total de las causas de muerte.
Y aunque las ECV se enfilan como un problema global, en México sus detonantes podrían ser otros, apuntan expertos. Tienen especial injerencia las enfermedades no transmisibles como el sobrepeso, obesidad y la diabetes.
La Encuesta Nacional de Salud (Ensanut) del 2012, la más reciente en su tipo, refirió que en el país hay 34 millones de personas con sobrepeso y 26 millones con obesidad. Condiciones que ponen a México en el primer lugar del mundo por la prevalencia de estas enfermedades, que le cuestan al Estado más de 70 mil millones de pesos.
“La obesidad por sí sola aún sin el paciente que es diabético o hipertenso, lleva dos veces el riesgo incrementado al de una persona que no es obeso, para desarrollar insuficiencia cardiaca”, explicó el doctor José Ángel Cigarroa López, jefe de la coordinación del Programa de Trasplante Cardiaco del Hospital de Cardiología del Centro Médico Nacional Siglo XXI.
Por su parte, la diabetes es la segunda causa de muerte entre los mexicanos; en 2013 cobró la vida de 89 mil 492 personas.
La diabetes tipo 2, que se caracteriza porque el cuerpo produce insulina, pero no lo suficiente como para contrarrestar sus niveles de glucosa. Esta enfermedad ha sido diagnosticada en personas mayores de 10 años, y afecta a 6 millones 500 mil mexicanos. Se estima que una proporción igual sigue sin ser detectada dentro de la población.
¿DE QUÉ MUEREN LOS MEXICANOS?
El desplazamiento de comida sana por chatarra ya había sido alertado en el 2005 por el London School of Hygiene & Tropical Medicine, uno de los centros de posgraduados más prestigiosos del mundo.
Mientras la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es el consumo de 400 gramos de frutas y verduras al día, los expertos londinenses determinaron que México se encontraba en el grupo de países que entre las personas de 15 y 80 años, tenía un promedio de 194 gramos al día.
Conforme el tiempo, la industria de alimentos y bebidas ganó terreno en México. El país llegó a tener la mayor prevalencia de obesidad en el mundo en el 2013, al tiempo que el consumo de refrescos también se fue alzando.
Asimismo, un estudio de la Universidad de Tufts específico en el 2010 que México tenía el mayor índice de muertes atribuidas al consumo de estas bebidas saborizadas, 405 por cada millón de habitantes, mientras que Bangladesh fue el de menores tasas, con una persona por cada millón.
En igual proporción este país ha sido el principal consumidor de bebidas azucaradas. La organización civil El Poder del Consumidor (EPC) estimó un consumo de 163 litros por persona al año.
“Lo que se ha visto en general es que el consumo de alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas es que ha estado en expansión a partir del Tratado de Libre Comercio en 1994”, explicó la coordinadora de salud de EPC, Fiorella Espinosa De Candido.
“Ya se ha visto que esos componentes son un factor de riesgo no sólo por la grasa sino por desarrollar efectos metabólicos, el exceso de azúcar genera resistencia a la insulina que es un factor de riesgo para la diabetes”, agregó.
Por su parte, otro hábito que tiene prevalencia dentro de la población es el consumo de tabaco. Datos de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) estiman que en el país hay 17 millones de fumadores.
Cuando el Presidente Enrique Peña Nieto dio a conocer en enero el programa de Prevención y Atención de las Adicciones hizo hincapié en que 44 mil personas fallecen cada año por esta causa.
“En el país vienen muriendo un poquito más de 600 mil personas [al año]. Es casi el 9 por ciento, que tiene que ver con el consumo de tabaco, es una enfermedad hecha y derecha”, dijo Juan Núñez Guadarrama, Coordinador de la Alianza Nacional para el Control del Tabaco (Aliento).
El tabaco está asociado con el desarrollo de 21 enfermedades asociadas, principalmente las cardiovasculares, sin embargo también están asociadas con el desarrollo de varios tipos de cáncer. En especial con el 70 por ciento de los casos de cáncer de pulmón, de acuerdo con el Instituto Nacional de Cancerología.
“Y otra importante que se desarrolla por tabaco es la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, que abarca bronquitis crónica, y sobre todo, el enfisema pulmonar, que es una enfermedad irreversible. Sería el equivalente a la cirrosis, es muy caro, es una dificultad para respirar grave a todas las horas que le quedan de vida a esa persona”, explicó Núñez.
El cáncer más allá de ser una enfermedad es un cúmulo de 200 enfermedades diferentes. En México los tumores malignos son la tercera causa de muerte. Ya que cobran 75 mil vidas.
MORTALIDAD INFANTIL
“La primera causa de mortalidad infantil es el parto”, explica el pediatra Alberto Orozco Gutiérrez, de la Universidad La Salle.
La asfixia y el nacimiento prematuro hacen que la llegada a este mundo sea efímera para 14 mil infantes, de acuerdo con datos del Sistema Nacional de Información en Salud (SINAIS).
Y el Inegi coloca a las causas perinatales como la décima causa de mortalidad en México dentro del resto.
“En el primer año de vida, las principales causas de muerte son las malformaciones congénitas, las infecciones respiratorias y las diarreas”, dijo el pediatra.
Una vez pasada esa etapa, 5 mil 700 menores fallecen entre uno y cuatro años por enfermedades infecciosas,.
“Por enfermedades intestinales, respiratorias, y ya aparecen otro grupo que son los accidentes en vehículos”, dijo Orozco, estos últimos cobran 425 vidas.
Si bien la desnutrición es la décima causa de muerte a nivel infantil. Uno de los aspectos que derivan en problemas de salud posteriores es la falta de lactancia materna.
La lactancia materna está asociada con elevar los anticuerpos del bebé, promover el desarrollo sensorial cognitivo, reducir la mortalidad infantil y prevenir enfermedades propias de la infancia como la diarrea y la neumonía.
México maneja los índices más bajos de Latinoamérica. El promedio de lactancia materna exclusiva en el país, que abarca los primeros 6 meses de vida del bebé, es de 14.4 por ciento, apenas cinco puntos por encima de República Dominicana.
“Han disminuido los problemas infecciosos pero aumentan los problemas propios de países desarrollados, en ese aspecto México se comporta como país desarrollado, desgraciadamente aunque no lo sea. Entonces empieza a haber otro tipo de patologías: obesidad, diabetes, abuso de substancias. Los niños están sometidos a estrés, cada vez hay más niños con intentos de suicidio, con depresión, abuso de drogas, la violencia va aumentando”, dijo anteriormente a este medio el médico Alejandro Esquivel, coordinador de pediatría del hospital HMG Coyoacán.
MUERTE POR GÉNERO
Si bien las enfermedades del corazón son la principal causa de muerte, no afecta a mujeres y hombres por igual. Las estadísticas del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) refieren que en ellas representa la quinta parte de las defunciones, 19.8 por ciento, mientras que en ellos el 16.8 por ciento.
En el caso de la diabetes, tampoco afecta a los géneros por igual, ya que representa el 16.6 por ciento de muerte en ellas, y el 12.2 por ciento de los hombres.
“También se deben mencionar los tumores malignos y las enfermedades cerebro-vasculares, para las que ocurre un mayor número de defunciones de mujeres respecto al de hombres”, cita el informe del 2014, del Instituto.
En las mujeres, es el cáncer de mama el más mortífero. El país tiene una tasa de mortalidad del 17 por cada 100 mil mujeres.
La investigadora del Incan, Karla Unger-Saldaña, dijo durante una conferencia de prensa por el mes del cáncer de mama que contrario a lo que comúnmente se piensa, las mexicanas sólo tardan 10 días en buscar ayuda, una vez han percibido que presentan alguna anomalía en el seno.
Sin embargo, a diferencia de Estados Unidos y Gran Bretaña, donde el intervalo de tiempo entre el diagnóstico y el tratamiento oscila alrededor de un mes y medio, en México las mujeres esperan hasta 7 meses para recibir tratamiento. Y esto se debe a la falta de agilidad del Sector Salud.
Aunque no parezca, no siempre se murió igual en este país. Un estudio del Instituto de Métrica y Evaluación en Salud (IHME, por sus siglas en inglés) señaló que en el 2013 las principales causas de muerte prematuras fueron la isquemia cardíaca, las enfermedades del riñón, la diabetes, accidentes y violencia.
Un panorama muy lejos de 1990, donde según el estudio, las muertes prematuras se debieron a enfermedades diarreicas, infecciones respiratorias, partos prematuros, accidentes viales y anomalías congénitas.
Los mexicanos, niños y adultos, hombres y mujeres, están adoptando el estilo de vida de los países desarrollados -aunque no lo sea- con todas las consecuencias que esto trae consigo: los avances en la medicina y el sistema de salud de México abatieron las infecciones gástricas y respiratorias como las principales causas de muerte, pero dieron paso a las enfermedades crónico degenerativas para atacar en un largo y generalmente doloroso proceso la salud.