En concreto, hoy entraron en vigor la subida paulatina del impuesto sobre el valor añadido (IVA) en las islas del mar Egeo, la reforma del sistema de pensiones, que tan solo en este año obligará al Estado a ahorrar 450 millones de euros y la eliminación del subsidio del gasóleo a los agricultores.

Las seis islas del mar Egeo con los ingresos más altos, Santorini, Míkonos, Rodas, Naxos, Paros y Skiathos, son las primeras que dejan de tener un descuento del 30 por ciento en el IVA, en vigor desde hace más de veinte años.

A partir de hoy estas islas deberán aplicar las tarifas del IVA vigentes en el resto del país, el 6 por ciento, el 13 por ciento y el 23 por ciento.

La mayoría de las islas de la región deberán aplicar los nuevos tipos impositivos a partir del 1 de junio de 2016, mientras que las que se encuentran más lejos del territorio continental y tienen mayores dificultades de abastecimiento y conexión tendrán tiempo hasta el 1 de enero de 2017.

La reforma de las pensiones que se pone en marcha a partir de hoy afecta a todos los jubilados que se han retirado desde el 1 de julio pasado.

Con ella se amplía progresivamente la edad de jubilación a los 62 años para los que ya tienen 40 años de vida laboral y a los 67 años para los demás.

Para los que cumplen la condición mínima de 15 años de vida laboral y ya han solicitado la jubilación, el Estado solo asegura la pensión mínima actual de 486 euros mensuales para los que tienen 67 años.

Los demás, verán reducidas sus pensiones en hasta un 40 por ciento hasta que hasta que lleguen a la edad de 67 años.

El Gobierno debe además presentar este mes a los acreedores su plan para reducir el gasto en pensiones este año en un 0.25 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), lo que se traduce en 450 millones de euros, un ahorro al que se comprometió al firmar el tercer rescate.

El ministerio de Trabajo elabora escenarios que prevén recortes del 6 por ciento a las pensiones superiores a los mil 500 euros y del 10 por ciento a las superiores a los 2 mil euros mensuales.

En septiembre entró ya en vigor la subida de las contribuciones al seguro de enfermedad de los jubilados en dos puntos porcentuales, de 4 por ciento a 6 por ciento, lo que se traduce en una reducción de facto de sus pensiones.

Además, a partir del 1 de enero de 2016, la pensión mínima garantizada deberá ajustarse a la evolución del PIB y del Índice de Precios al Consumo (IPC), lo que podría conducir a su reducción automática, a la vista de que Grecia padece el doble mal de la recesión y la deflación.

Desde mayo de 2010, cuando Grecia firmó el primer plan de rescate, las pensiones se han reducido en casi un 40 por ciento.

Además a partir de hoy inicia la eliminación de la subvención del gasóleo para los agricultores, lo que significa que el impuesto sobre este carburante se triplica.

A partir del 1 de octubre de 2016 se incrementará hasta alcanzar el mismo nivel que el que está en vigor para los demás consumidores.

Esta medida se añade al incremento del impuesto sobre la renta de los agricultores del 13 por ciento a 26 por ciento y el aumento del 27.5 por ciento al 55 por ciento del pago anticipado de este gravamen.

Inmediatamente tras la constitución del nuevo Parlamento, el legislativo deberá votar nada menos que 31 medidas que los acreedores han puesto como requisito para desbloquear un tramo de 3 mil millones de euros de los 86 mil millones del tercer rescate, y el inicio de la negociación para la reestructuración de la deuda.
Entre ellas figuran dos temas extremadamente sensibles, buscar una solución a las deudas morosas que suman 84.000 millones de euros (cerca del 45 por ciento del PIB) y la exigencia de los acreedores de levantar la protección a las ejecuciones hipotecarias de primeras viviendas.

Además el Gobierno debe presentar el próximo lunes el borrador para los Presupuestos Generales del Estado de 2016 y un presupuesto suplementario para 2015, pues los ingresos presentaron un agujero de 4 mil millones de euros en los primeros ocho meses del año.

La estimación del Ministerio de Finanzas, según el periódico Kathimeriní, es que la contracción económica este año será inferior a lo previsto inicialmente, y en lugar del 2.3 por ciento tan solo será del 1.5 por ciento.

Según el periódico el presupuesto de 2016 será elaborado sobre la base de esta estimación, lo que permitiría alcanzar los objetivos de déficit primario de 0.25 por ciento del PIB en 2015 y del 0.5 por ciento del PIB en 2016 sin necesidad de medidas de recortes adicionales.