Ciudad de México, 1 de abril (SinEmbargo).– Han pasado 16 meses desde que Francisco Vega de Lamadrid juró como Gobernador de Baja California y su gobierno no ha respondido a las amplias expectativas que generó durante su campaña electoral; por el contrario, su discurso y acciones lo dibujan más como protector de intereses de patrones y empresarios que como defensor de la ciudadanía que lo llevó al poder con su voto, denunciaron legisladores.
Francisco Vega, quien gusta que lo llamen con el sobrenombre de “Kiko”, ha sido tema constante de la prensa nacional. No ha trascendido a los medios por su habilidad política para impulsar el crecimiento de la entidad que gobierna sino por el escándalo de un millonario predio comprado en Valle de Guadalupe, sus declaraciones misóginas y por su manejo del conflicto de jornaleros agrícolas del Valle de San Quintín.
Francisco Vega llegó a la casa de gobierno después de dos intentos fallidos para alcanzar el poder. La primera vez fue en 2001 cuando perdió la candidatura en la elección interna panista en contra de Eugenio Elorduy. La segunda fue en 2007, año en que también perdió en la elección interna albiazul en contra de José Guadalupe Osuna Millán.
Pero 2013 fue su año. Ganó por 25 mil votos la elección al candidato priista Fernando Castro Trenti. Lo hizo cobijado con los colores de la alianza electoral integrada por los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD), Nueva Alianza (Panal) y Partido Estatal de Baja California.
Sin embargo, las amplias expectativas generadas tras el triunfo electoral se han transformado en desilusión para gran parte de los bajacalifornianos, cuya economía ha resentido la política fiscal del Gobierno federal que decidió eliminar el subsidio al Impuesto al Valor Agregado (IVA) en la franja fronteriza, así como la falta de pericia del gobierno local para transformar recursos presupuestales en opciones de desarrollo.
“Las condiciones que se viven en el estado dan cuenta de que no hay un gobierno que esté bien evaluado por los ciudadanos, o por lo menos que tengan expectativas de que la cosa puede mejorar, creo que en ese sentido los hechos lo demuestran, que hay mucha insatisfacción por parte de los ciudadanos”, afirmó en entrevista el Diputado federal Abraham Correa Acevedo, del Partido de la Revolución Democrática.
Los yerros del Gobernador Vega de Lamadrid pueden observase de forma más nítida en sus acciones para resolver la crisis de los jornaleros migrantes, desatada en San Quintín, el pasado 17 de marzo.
Jornaleros agrícolas levantaron un paro general y bloqueos en la carretera Transpeninsular, para denunciar que sufren explotación laboral, bajos sueldos, condiciones de vida miserables, horas extras no pagadas y carencia de seguridad social.
Por lo cual demandaron incremento salarial, afiliaciones al seguro social, respeto de la jornada laboral de 8 horas y vacaciones conforme a la ley; pago de horas extras e investigar los casos de acoso sexual a mujeres jornaleras.
La respuesta de la policía estatal y municipal fue dispersar la manifestación con balas de goma y detener a 200 jornaleros. Ese mismo día el Gobernador “Kiko” Vega afirmó que no estaba sujeta a negociación la liberación de los jornaleros que no exigían nada más que mejores condiciones laborales.
En ese momento los ojos de la Nación se colocaron en la población de San Quintín, en el municipio de Ensenada, Baja California. En un intento por remediar la situación el Gobernador de Baja California instruyó la realización de mesas de diálogo entre patrones y trabajadores agrícolas.
Sin embargo, aunque el discurso oficial habla de avances en las negociaciones, las declaraciones del mandatario van en sentido contrario.
Por ejemplo, Francisco Vega consideró que si se aumentaba el salario de los trabajadores migrantes que llegan a los valles agrícolas de su entidad, se fomentaría la llegada de más trabajadores.
“Qué bueno que se pague mucho, pero yo les garantizo que el número de jornaleros migrantes que nos van a visitar con el deseo y el ánimo de prosperar en sus vidas van a ser mayores”, dijo.
No agregó más, pero sus palabras sugieren que al mejorar las condiciones laborales se provocaría una ola migrante que pondría en riesgo la estabilidad social y laboral en la entidad.
GOBERNADOR FRÍVOLO: BLÁSQUEZ
La oposición criticó que el Gobernador, por lo menos en el discurso, se ha puesto del lado de los empresarios locales y ha dejado de lado demandas laborales básicas establecidas en la Constitución, como es el pago justo por jornadas laborales de 8 horas, pago de horas extras, mínimas condiciones de seguridad y salud en el ambiente laboral, entre otras.
El Senador Marco Antonio Blásquez Salinas, del Partido del Trabajo (PT), afirmó en entrevista para SinEmbargo que pareciera que el Gobernador “Kiko” Vega no ha leído el pliego petitorio de los jornaleros del Valle de San Quintín, porque no se ha dado cuenta de que sus demandas son justas y están en el marco de la legalidad.
“El Gobernador se tiene que sentar a la mesa de negociación, si el leyera el pliego petitorio se daría cuenta que el 70 por ciento de los temas son de orden de revisión de la autoridad del trabajo”, dijo el Senador por Baja California.
“El otro 30 por ciento es una cuestión de negociación laboral. Si el [Gobernador] tuviera la habilidad de reunir a los patrones, de reunir a la autoridad laboral local y federal y contar con una Secretaría del Trabajo que cumpliera las expectativas, podría solucionar el conflicto”, afirmó
El legislador Blásquez afirmó que no se trata de acusar a los empresarios y productores, sino de negociar con ellos para garantizar que las personas que ofrecen su fuerza de trabajo puedan ser beneficiarios de las condiciones mínimas laborales que están consagradas en la Constitución.
Y es que los patrones no han mencionado que el 90 por ciento de lo que se cosecha en San Quintín se exporta y recibe su paga en dólares. Lo cual convierte en un insulto el hecho de que se pague a 110 pesos la jornada laboral de ocho o diez horas.
“Entendemos que el mercado agrícola es un mercado volátil, hay momentos en que un kilo de fresa vale 10 pesos y hay momentos en que vale 4 o que vale 20 pesos, va a depender también de la especulación en el mercado mundial de los alimentos, pero por lo mismo el trabajador no debe asumir solamente las perdidas, también se debe beneficiar de las ganancias cuando el mercado sube”, afirmó el legislador por Baja California.
Por otro lado, el Senador Marco Blásquez criticó la “frivolidad” del Gobernador Vega al responsabilizar a la izquierda, particularmente a los integrantes de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) de estar detrás de actos vandálicos en San Quintín.
“No es posible que un Gobernador quiera resolver una situación que tiene que ver con la salud pública, que tiene que ver con el hambre de la gente, con el subdesarrollo de miles de personas, tomándose fotografías y publicándolas en redes sociales, haciéndose el gracioso y frívolamente diciendo que atiende los problemas, cuando el pliego petitorio, que se le exige como gobernador del estado, no está siendo atendido”, explicó el Senador Blásquez ante el pleno del Senado, durante la discusión del tema el miércoles pasado.
Por todo esto, el Senador Blásquez adelantó a este diario digital que la próxima semana se reunirá con representantes de los jornaleros agrícolas para asesorarlos legalmente, a fin de que su movimiento y demandas vayan directamente a los tribunales y no se queden en simples notas periodísticas.
Asimismo, el Senado avaló la creación de una comisión plural de legisladores para recorrer la zona y reconocer los padecimientos de los trabajadores agrícolas, tanto en materia laboral como por daños a su salud.
INSATISFACCIÓN CIUDADANA: PRD
El Diputado perredista Abraham Correa refirió que en términos generales existe una insatisfacción ciudadana ante el gobierno de “Kiko” Vega.
“No se ha cumplido, definitivamente no se ha cumplido con las expectativas que se tenían, se esperaba mucho más del gobernador, se espera mucho más del gobernador, todavía tiene el tiempo de corregir el rumbo”, detalló el ex dirigente local perredista.
El legislador explicó que los problemas no se concentran solo en la zona de San Quintín, sino que todos los municipios padecen problemas que no se han podido atender por la falta de coordinación entre el gobierno estatal y los ayuntamientos.
“El Gobernador del estado no ha atendido adecuadamente al municipio de Ensenada en general, no nada más a la zona de San Quintín, pero en el caso general del municipio de Ensenada nos ha ido muy mal”, afirmó en entrevista.
El perredista recalcó que no se observa acción contundente de ninguno de los tres niveles de gobierno y mucho menos existe coordinación entre el alcalde de Ensenada, Gilberto Hirata, y el Gobernador Francisco Vega, lo cual pone en riesgo el desarrollo local.
“El Alcalde de Ensenada está peleado hasta con los diputados del PRI, ahora en la definición del presupuesto hasta se peleó hasta con su suplente el Diputado Ricardo Medina”, recalcó.
ACERCAMIENTO CON JORGE HANK ROHN
El triunfo electoral de Francisco Vega fue festejado por los presidentes nacionales del PAN, Gustavo Madero Muñoz y Jesús Zambrano Grijalva del PRD. Pero el gusto duró muy poco a los perredistas quienes inmediatamente vieron como Kiko Vega los hacía a un lado de sus planes para gobernar la entidad.
«Kiko» Vega se alejó de los perredistas pero se acercó a Jorge Hank Rhon, ex alcalde de Tijuana y empresario con gran poder e influencia en la entidad.
Hank Rhon es priista, dueño de Grupo Caliente y controlador del poderoso Sindicato Nacional de Trabajadores Operadores de Libros y Establecimientos de Diversión, Hoteles, Restaurantes y Comunicaciones (Sintoled).
Aunque nunca ha sido aceptado su acercamiento por ninguno de ambos personajes, sus huellas son inocultables. Así quedó demostrado desde la campaña electoral cuando el hijo de Jorge Hank, César Hank Inzunza, organizó un encuentro con el candidato panista para asegurar que de ganar la elección, apoyaría el desarrollo cultural en la región.
«Kiko» Vega se comprometió a eliminar el impuesto estatal a los espectáculos públicos, apoyar festivales independientes, ferias de libros, muestras cinematográficas y festivales de música, justamente en varios negocios que interesan al grupo económico de Jorge Hank Rhon.
Por eso, causó poca sorpresa el hecho de que en noviembre de 2013 César Hank, músico, integrante de una banda de reggae y organizador de conciertos fue designado titular del Instituto de Cultura de Baja California en Tijuana y Rosarito.
LA INEXPLICABLE RIQUEZA DE KIKO VEGA
Según ha revelado la prensa local, el Gobernador “Kiko” Vega estaría construyendo una lujosa mansión en un exclusivo fraccionamiento en una de las colonias más acomodadas de Tijuana, con un valor de tres millones de dólares.
De hecho este no es el primer escándalo inmobiliario del Gobernador. En agosto de 2013 poco antes de asumir el cargo de Gobernador, Francisco Vega compró un terreno de seis hectáreas ubicado en la región vitivinícola de Valle de Guadalupe, en el municipio de Ensenada. La propiedad en el área conocida como “El Porvenir” le habría costado al ahora Gobernador cerca de cinco millones de pesos.
El Gobernador ha aceptado públicamente que posee cerca de 20 propiedades tanto en Baja California como en San Diego, en Estados Unidos.
La exposición de estos temas, entre otros, ha provocado además que el Gobienro de Baja California haya emprendido una campaña contra los periódicos La Crónica de Mexicali y el periódico Frontera.
“El Gobernador, en un caso inédito, acusa de extorsión, a través de inserciones pagadas a este periódico, señalando que los muchos actos de corrupción que se le señalan en esas páginas son porque no les quiere comprar publicidad, y a través de ese desplegado anuncia la cancelación comercial con esa empresa”, explicó el Senador Marco Antonio Blásquez.