Siete de los ocho aspirantes para la presidencia de la FIFA aún deben superar un examen de integridad por parte de la comisión de ética de la Federación para poder presentarse definitivamente a la elección, que se realizará el 26 de febrero de 2016.
Las elecciones para la presidencia de la FIFA se llevarán a cabo el 26 de febrero de 2016. Foto: EFE/Archivo
Zúrich, 28 oct (dpa) – Siete candidatos siguen en la carrera por ser el futuro presidente de la FIFA en vez de los ocho que se habían presentado inicialmente, anunció hoy el ente rector del futbol mundial.
De la lista publicada hoy en Zúrich se cayó el ex jugador David Nakhid, de Trinidad y Tobago, que fue excluido por la comisión electoral ad hoc porque una de las cinco federaciones que lo respaldó había comprometido también su apoyo con otro candidato, algo que va contra la normas.
“Las asociaciones miembro de la FIFA han presentado siete candidatos en tiempo y forma para la elección de presidente en el congreso extraordinario”, señaló el comunicado de la FIFA.
Los candidatos que siguen en liza para suceder a Joseph Blatter son el príncipe jordano Ali bin al Hussein; el jefe de la Federación de Liberia, Musa Bility; el francés Jérôme Champagne, ex vicesecretario general de la FIFA; el suizo Gianni Infantino, actual secretario general de la UEFA; el francés Michel Platini, presidente de la UEFA; el jeque bahreiní Salman bin Ibrahim Al Khalifa, presidente de la Confederación Asiática de Futbol (AFC), y el líder antiapartheid sudafricano Tokyo Sexwale.
Los siete aspirantes deben superar aún un examen de integridad por parte de la comisión de ética de la FIFA para poder presentarse definitivamente a la elección, que se realizará en el congreso extraordinario del 26 de febrero de 2016 en Zúrich.
Platini era el claro favorito hasta que la comisión de ética lo suspendió durante 90 días junto con Blatter por una investigación por un pago sospechoso que el ex jugador recibió de la FIFA en 2011 de dos millones de francos suizos (unos 2.06 millones de dólares).
Debido a ello, la candidatura de Platini no puede ser procesada por el momento por el comité electoral ad hoc encargado de controlar el proceso. Si la suspensión se levanta o vence a tiempo, el comité decidirá “cómo proceder con el candidato afectado”, indicó la FIFA.
Los controles de integridad los llevará a cabo la cámara de investigación de la comisión de ética del organismo. Sin embargo, ésta “no dará ninguna recomendación sobre si un candidato puede o no presentarse a la presidencia”, advirtió la FIFA.
“Tras recibir los resultados de los exámenes de integridad, el comité electoral ad hoc volverá a reunirse para revisar las postulaciones y validar su conformidad con las reglas de la FIFA correspondientes”, añadió el comunicado. Una vez superado ese trámite, los aspirantes podrán considerarse “formalmente” habilitados para presentarse a las elecciones. Es la ocasión en la que más candidatos se han presentado desde que Blatter accedió al poder en 1998.
El suizo también está suspendido temporalmente por el mismo motivo que Platini, ya que el pago se realizó en la época en la que se presentaba a una nueva reelección y necesitaba el apoyo de Europa.
Los dos implicados, sin embargo, aseguran que el dinero se transfirió como compensación por un trabajo de asesoría realizado por el ex futbolista francés de 1998 a 2002.
Aunque no hay un contrato firmado que lo avale, ambos aseguran que se trató de un “acuerdo entre caballeros”. La situación llevó a la UEFA a presentar con Infantino a un candidato de urgencia en el último momento.
En caso de que Platini consiguiera finalmente limpiar su nombre y presentarse a las elecciones, el suizo se retiraría probablemente de la carrera. Otra opción es que los votos europeos se trasladen mayoritariamente hacia el jeque Al Khalifa, que antes de la sanción había expresado su apoyo a Platini.
Estos tres candidatos, junto al sudafricano Tokyo Sexwale, parecen en este momento los que más posibilidades reúnen de victoria, aunque todo lo que rodea a la FIFA, sacudida por el caos y los escándalos de corrupción, es en este momento incierto y la carrera no ha hecho sino empezar.
