Ciudad de México, 25 de marzo (SinEmbargo).– La prensa alemana dice que tiene 100 hijos. La británica le cuenta 98; quizás mientras usted lee esto la cifra ya supera el centenar.
Ed Houben, holandés, empezó en el año 2002 a inseminar “de manera natural” a mujeres de todo el mundo. Y gratis. Empezó como donante de esperma anónimo, pero después de que la ley lo obligó a revelarse lo hizo en serio: abrió una cuenta de Facebook para ofrecer sus servicios y listo: mujeres de distintas latitudes se apuntaron.
Ed vive en una casa-granja en el noroeste de Alemania, dice BBC. No es guapo, agrega NCRV, pero algo tendrá porque genera confianza: lesbianas, parejas heterosexuales que probaron todo, mujeres solteras. No discrimina. Él les resuelve el problema.
En distintas entrevistas cita el número de intentos: tres parecen ser el promedio para que una mujer quede embarazada.
Ed ve a sus hijos si es que las madres se los acercan. Así se lo ha dicho a la prensa que lo ha visitado de distintas partes del mundo. “Quizá la gente piense que es una manera de practicar sexo sin aceptar responsabilidades, pero normalmente soy la única persona con la que pueden hablar cuando nada funciona», dijo a la BBC.
“En su computadora, tiene actualizado un catálogo de todos ellos [los hijos] para reducir las posibilidades de un cruce inesperado. ‘Si en el futuro uno de mis hijos se plantea formar una familia con alguien que desconoce la identidad de su padre natural, siempre tendrá la posibilidad de consultar esta lista’, afirma”, según la misma cadena británica.
Tiene algunos kilos de más pero eso no parece importar ni a él ni a sus parejas temporales.
Ed se ve bastante relajado, tranquilo.