Las frutas y verduras como el aguacate, plátano o jitomate aportan grandes beneficios para la salud por lo que es importante integrarlas en nuestros platos diarios, pero ¿cómo conservar por más tiempo estas frutas y verduras? Algunos consejos con usar bolsas de papel o guardar en un recipiente con agua. Te compartimos algunos tips para que las frutas y verduras permanezcan en buen estado por mayor tiempo.
Ciudad de México, 29 de mayo (SinEmbargo).- Incluir frutas y verduras en la dieta diaria es una de las recomendaciones de los especialistas para una alimentación saludable, un aspecto que influye mucho para tener una buena salud. «Las frutas y las verduras son componentes esenciales de una dieta saludable, y un consumo diario suficiente podría contribuir a la prevención de enfermedades importantes, como las cardiovasculares y algunos cánceres», señala la Organización Mundial de la Salud.
En estos tiempos de COVID-19 toma relevancia este tema debido a que padecimientos como diabetes o sobrepeso convierten a las personas en población de riesgo ya que son más susceptibles a tener complicaciones. Ante la recomendación de permanecer en casa compartimos algunos consejos para hacer que las verduras y frutas se conserven en buen estado por más tiempo para así salir lo menos posible.
–Aguacate: Es muy común que después de partir un aguacate este comience a ponerse de color marrón, esto ocurre porque se expone al oxígeno, así que después de almacenarlo ya no luce tan apetitoso. Un truco para que esto no ocurra es añadir un poco de jugo de limón sobre la parte que queda expuesta, esto hará más lento el proceso de oxidación; otra opción en guardarlo junto a las cebollas.
En el caso contrario, en el que se busque hacer madurar más rápido un aguacate se puede guardar en una bolsa de papel o envolver en papel periódico, esto es porque esta fruta se ablanda al liberar gas etileno, al estar en una bolsa, este gas se queda atrapado y hace más rápido el proceso de maduración. No se deben usar bolsas de plástico porque el aguacate consumirá todo el oxígeno y acumulará dióxido de carbono, es decir, no se madurará.
Plátanos: La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) recomienda envolver los plátanos en un film plástico (es decir, el plástico que viene en rollo y se usa para sellar alimentos o recipientes) y colocarlo en el refrigerador, esto hará que duren por más tiempo.
Frutos rojos: La FAO aconseja remojar los frutos rojos en una parte de vinagre blanco y 10 de agua, enjuagar, secar por completo y guardar en el refrigerador. Los frutos rojos aportan fibra son ricos en antioxidantes y vitamina C, entre ellos están las cerezas (aportan betacarotenos, que reducen el riesgo de padecer enfermedades del corazón), frambuesas (ricas en vitamina C), arándanos (ayudan a mejorra la circulación) y las fresas (ayudan a combatir la anemia).
Lechuga: Existen varios tipos de lechuga, una de las más conocidas y usadas es la lechuga romana que tiene una caducidad de una semana aproximadamente. Martha Chavarría explica en ElDiario.es que hay dos factores para su conservación: humedad y aire. Algunos de sus consejos son guardar la lechuga en una bolsa y en en los cajones de la zona menos fría del refrigerador, otro es procurar que las hojas no toquen las paredes e ir arrancando estas con la mano cuando vayan a integrarse en un platillo; además no hay que ponerla cerca de los platanos, manzanas o jitomates porque estos aceleran su proceso de deterioro.
Papas: La FAO recomienda usar bolsas de papel para las papas y guardarlas junto a una manzana (el gas etileno de las manzanas mantendrá frescas a las papas), lejos de las cebollas, esto radica en que las cebollas pueden absorber la humedad de las papás, además emiten un gas que puede llevar a que las papas se echen a perder antes de tiempo.
Manzanas: lo primero es lavarlas y secarlas muy bien, meterlas en una bolsa y guardarla en el refrigerador. Si ya cortaste algunas manzanas y sobró un pedazo, este puede remojarse por cinco minutos en un tazón con agua y media cucharadita de sal para evitar que se oxide, después se mete en una bolsa y se guarda en el refrigerador. Un consejo importante es no guardar las manzanas junto a otras verduras porque las manzanas acelerarán el proceso de descomposición de los vegetales.
Cebolla: Para las cebollas se puede usar una bolsa de papel con algunos ajugeros para que entre el aire y colocarla en un lugar fresco y seco. Para guardar un pedazo de cebolla se recomienda envolverlo en papel aluminio y guardarlo en el refrigerador.
Apio: Un tip es envolverlo en papel aluminio, cuando se guardan en una bolsa de plástico pierde humedad y se deteriora más rápido.
Jitomate: Si los jitomates ya están maduros lo mejor es dejarlos fuera del refrigerador en un lugar donde no haya sol. Si están muy maduros se deben colocar en un recipiente y guardarlos en el refrigerador. Para los jitomates que aún no están maduros, un truco es quitarles el tallo (si es que tienen) y guardarlos boca abajo en el refrigerador.