La Asamblea Constituyente planea analizar hoy los lineamientos para la construcción de vivienda popular por lo que ambientalistas protestaron y acusaron que los legisladores aprueban leyes que sólo favorecen a las inmobiliarias.
Ciudad de México, 14 de septiembre (SinEmbargo).- La Asamblea Legislativa de la Ciudad de México planea discutir la norma 26, relacionada con los lineamientos para la construcción de vivienda popular; no obstante, defensores de las áreas verdes que quedan en el ex Distrito Federal acusan que los legisladores buscan aprobar un paquete de dictámenes que sólo van a favorecer a las inmobiliarias y desproteger a la población.
La sesión estaba programada para las 11 de la mañana, pero el Frente Ciudadano Salvemos la Ciudad, compuesto por vecinos de más de 10 delegaciones, ya aguarda la llegada de los legisladores para impedir su ingreso a la ALDF ubicada en el centro de la Ciudad de México.
Al unísono de «los ciudadanos estamos hartos de lo que están haciendo en la ciudad», «Mancera, la ciudad no se vende», «no más corrupción», «fuera los que están matando la ciudad», «ya no los vamos a seguir aguantando diputadetes», «tienen que parar esto, no puede continuar la vorágine», los inconformes esperan la llegada de los diputados.
Mayela Delgadillo, vocera del frente, denunció que en la ciudad «ya no hay servicios, no hay agua y quieren terminar de colapsarla». Asimismo, reconoció la necesidad de vivienda que hay, pero, subrayó «debe haber un desarrollo urbano programado en esta ciudad. No hay forma de que se siga actuando así».
Miembros de la organización Agua para Todos mostró su apoyo a la movilización, pues, acusaron, «la ciudad se queda sin el recurso» y las viviendas que se pretenden construir no están al alcance económico de los ciudadanos de a pie.
Punto en el que coincidió Delgadillo y acusó que la corrupción de las empresas constructoras está terminando con las pocas zonas verdes de la CdMx y señaló a los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) como principales impulsores de dichas empresas, «esto es la corrupción inmobiliaria, las inmobiliarias han estado cabildeando sobre todo con esos partidos», dijo.
De igual manera cuestionó el papel de las autoridades para consultar a los ciudadanos cuando se pretenden levantar megaobras, bajo puentes, privatización del espacio público, entre otras edificaciones.
«Los legisladores son un fraude para la sociedad. [Los ciudadanos] no estamos pagando salarios para esto. No puede ser que crean que tienen el derecho de decidir sobre nosotros. Esto no es la democracia, está mal entendida y gran parte de la culpa la tenemos los ciudadanos por no exigir nuestros derechos», señaló.
Aseguró que es clara la oposición que existe en la ciudad, contra el desarrollo que quieren aplicar, por lo que hizo un llamado a las autoridades a respetar la voluntad de los capitalinos, de no hacerlo, advirtió, buscarán ampararse, llevar a cabo acciones públicas y «y lo que tengamos que hacer para parar esto».
La Unidad de Organización Social para la Integración Familiar (UNOS-IF) también se presentó a las afueras de la ALDF, para demostrar su apoyo a los legisladores, por lo que Delgadillo acusó que se trata de un grupo del PRD enviado por Raúl Flores, presidente de dicho instituto político en la CdMx.
César Arnulfo Cravioto Romero, coordinador del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en la ALDF, acusó que PRI, PAN y PRD confabularon para hacer una sesión extraordinaria con el fin de hacer cambios a la ley de vivienda «que a todas luces son negativos».
«No estamos del lado de los negocios del Jefe de Gobierno de la CdMx Miguel Ángel Mancera. No vamos a dudar en nuestras posiciones, no vamos a avalar estos atropellos legislativos para que logren sus cometidos. Vamos a defender sus demandas», aseguró ante los inconformes que se manifestaron a las afueras de la ALDF; sin embargo, Cravioto advirtió que los tres partidos mencionados representan mayoría dentro del pleno.
Las empresas constructoras pretenden levantar sus obras incluso en los suelos de conservación, que es donde hay nacimientos de agua del Sistema Cutzamala «no son proyectos que sean acordes a una política ambiental, es un negocio de unos cuantos», advirtió Clara Reséndiz, del pueblo El Contadero de la Delegación Cuajimalpa, durante un mitin a las afueras de la ALDF.
Además, la ciudadana denunció que en dos ocasiones ha sido objeto de amenazas de desaparición, por parte de dos funcionarios de la demarcación, de quienes no quiso revelar su nombre por temor a represalias, sólo se limitó a decir: «el Diputado Adrián Ruvalcaba conoce perfectamente quiénes son las personas que me han amenazado».
Reséndiz hizo un llamado a las autoridades de las 16 delegaciones para que hagan consultas respecto al uso de suelo, ya que, dijo, cada una cuenta con necesidades distintas. «No es posible que nos sigan dañando tanto. No podemos seguir permitiendo más atropellos, tenemos que defendernos», urgió a la población.
«No es vivienda popular, son departamentos que van a costar en 800 mil y más de dos millones de pesos», acusó.
Jaqueline, miembro de la organización Agua para Todos, Agua para la Vida y vecina de la delegación Iztacalco, acusó que los diputados están cometiendo «una arbitrariedad», al buscar aprobar una iniciativa que no beneficia a los capitalinos, sino a las grandes constructoras de la iniciativa privada. La ciudad están invadida por una privatización de vivienda donde hay muchos desplazamientos territoriales, a la gente de bajos recursos no se le toma en cuenta».
Aunado a ello, señaló, los hundimientos, las grietas, así como la falta de agua y la distribución inequitativa de la misma serán problemas que empeorarán a lo largo y ancho de la capital. «Estamos colapsando», y, de continuar con este ritmo de obras, el colapso será inminente e inevitable. «Se nos va a revertir todo lo que permitimos que las autoridades hagan. Debemos preguntarnos qué estamos haciendo para evitar que el Gobierno cumpla con su cometido», pidió.
«Más construcciones para gente rica van a tener todas las facilidades para acceder al agua, van a terminar con la poca que nos queda. Siempre el que tiene más [dinero] es el que gana», señaló.
La vecina de la delegación Iztacalco exigió que las autoridades paren las «imposiciones en los territorios» y escuchen las demandas de los ciudadanos. «La democracia aquí [en la capital] ya no existe», lamentó.