Usando el radiotelescopio Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), los científicos concluyeron que las galaxias se encuentran justo en la intersección de filamentos gigantes que forman una red de materia oscura.
Ciudad de México, 12 de diciembre (SinEmbargo).- Un equipo de astrónomos descubrió un nido de galaxias monstruosas situado s 11 mil 500 millones de años luz de la Tierra. Usando el radiotelescopio Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), los científicos concluyeron que las galaxias se encuentran justo en la intersección de filamentos gigantes que forman una red de materia oscura.
El hallazgo podrá permitir comprender cómo se forman y evolucionan estos astros hasta convertirse en enormes galaxias elípticas. Actualmente el universo se encuentra en un periodo tranquilo, sin embargo, hace 10 mil millones de años había zonas del Universo habitadas por galaxias monstruosas que forjaban estrellas a un ritmo cientos de miles de veces superior al que se observa hoy en la Vía Láctea.
Según expertos, mucho antes de que se formaran el Sol y la Tierra, estas galaxias monstruosas se formaban en ambientes especiales donde se concentra la materia oscura, pero hasta ahora había sido difícil determinar la posición de galaxias incubadoras de estrellas activas con la precisión necesaria para poner a prueba esta teoría.
El equipo de investigación japonés encabezado por el doctor Hideki Umehata, usó el radiotelescopio ALMA para realizar prolongadas observaciones de una pequeña porción del cielo conocida como SSA22, en la constelación de Acuario.
ALMA le permitió a los astrónomos determinar con precisión la ubicación de nueve galaxias monstruosas en SSA22. El equipo comparó las ubicaciones de estas galaxias con la de un cúmulo de jóvenes galaxias situado a 11 mil 500 millones de años luz de la Tierra, en SSA22, que se había estudiado en la luz visible con el telescopio Subaru, operado por NAOJ.
La forma del cúmulo observado con Subaru es un indicio de la presencia de una red tridimensional gigante de materia oscura invisible. Se cree que esta estructura en filamentos a su vez genera superestructuras en el Universo, tales como la Gran Muralla cósmica, una colosal estructura en filamentos de más de 500 millones de años luz de extensión. La estructura en filamentos presente en SSA22 podría llamarse una proto-Gran Muralla.
El equipo descubrió que las jóvenes galaxias monstruosas parecían encontrarse justo en la intersección de los filamentos de materia oscura. Este hallazgo avala el modelo según el cual las galaxias monstruosas se forman en áreas donde hay grandes concentraciones de materia oscura. Y como las grandes galaxias elípticas actuales no son más que galaxias monstruosas que se han distendido con el tiempo, también se cree que nacieron en las intersecciones de estas grandes estructuras.
Los hallazgos de este estudio se publicaron en un artículo de la revista Astrophysical Journal Letters.