El ex Defensor del Pueblo de España Álvaro Gil Robles, con quien ha conversado, ha glosado la biografía de Bahari, parte de cuya vida inspira el documental “Rosewater”, del estadounidense Jon Stewart, en el que relata la tortura que sufrió durante 118 días en una cárcel de máxima seguridad en Irán, en 2009.

Bahari ha considerado que “se está abriendo una brecha entre la gente y el poder, que pueden abocar a un cambio en el futuro” en Irán.

El fracaso y las guerras en otros países como Siria o Libia servirán como antídoto para que no se repitan hechos similares en Irán y el cambio sea pacífico, a juicio de este periodista, nacionalizado canadiense y con residencia actual en el Reino Unido.

Se ha referido también a la politización del clero en su país y al hecho de que los religiosos no piensen exclusivamente en las necesidades espirituales del pueblo, sino que se ocupen de tareas como la recogida de basuras o los programas militares nucleares.

No obstante, ha subrayado que, al saberse politizados, muchos clérigos están interesados en aspectos más pragmáticos y que la revolución de 1979, que desembocó en el derrocamiento del sah Reza Pahlevi y la instauración de la República islámica, “muestra lo contraproducente que puede ser que los clérigos se encarguen del Estado Islámico”.

No obstante, Bahari, que fue reportero de Newsweek de 1998 a 2011, ha destacado aspectos positivos tras aquella revolución, como que acudieran a estudiar muchas mujeres que pertenecían a la sociedad tradicional religiosa, hasta el punto de que, 36 años más tarde, el 65 % de los licenciados sean mujeres.