Ciudad de México, 3 de noviembre (SinEmbargo).- Alex Rodríguez es uno de los peloteros mejor pagados en las Grandes Ligas. Desde su incursión en el Rey de los Deportes, su rostro se ha consolidado como una figura en un deporte tan exigente como noble en su recompensa. Con un talento mostrado en innumerables ocasiones, el tercera base de los Yanquis de Nueva York se metió en una polémica deportiva que llegó hasta las altas esferas del gobierno estadounidense.
La Major League Baseball (MLB), suspendió al pelotero de sangre dominicana en agosto. Según los altos mandos de la liga, basándose en los resultados expuestos por un equipo investigador, determinaron dejar sin participación a Rodriguez tras acusarlo de violar la política de consumo de drogas, yendo en contra del contrato laboral que todo profesional firma. La apelación al castigo le permitió cerrar la temporada decepcionante de los Yanquis. Tras casi 10 audiencias, el caso tomó un rumbo que prevé un futuro turbulento en lo legal.
Alex ha demandado a la liga y al comisionario Bud Selig, acusándolos de realizar una “cacería de brujas” en su contra. La suspensión de 211 juegos como castigo, es para el pelotero, un exceso que busca truncar su carrera. Mientras varios estadios lo abucheaban y le mostraban cartulinas sobre las acusaciones, el Yankee Stadium le daba su constante apoyo. Uno de los hombres más odiados en el béisbol de la Gran Carpa, tenía ahora una loza pesada sobre la espalda que le daba un estatus de malo a lo largo del país. Lejos del amor por el deporte y el juego limpio, el nombre de Alex Rodríguez, se manchó gracias a una investigación de orden oficial.
«Me inquietan mucho los resultados de la investigación de mi equipo en relación con la conducta de la MLB», declaró el Yanqui en un comunicado. El comisionado Selig ha declarado en varias ocasiones sentirse conforme con los resultados de todo el proceso. El futuro de Rodríguez, a sus 38 años, parece claudicar una carrera de un pelotero que tuvo siempre un futuro brillante. «Es triste que el comisionado Selig otra vez se haga el distraído, a sabiendas de que se han cometido delitos bajo su régimen», sentenció el beisbolista a la espera que su demanda tenga un efecto que lo reactive.
«Tengo plena fe en mi equipo legal. Sí, esto (la demanda) es necesario para protegerme a mí mismo, pero le servirá también al chico de 18 años que ingresa a la liga, para asegurarnos de que no tiene que soportar lo que estoy soportando yo», dijo Rodríguez una vez que concluyó la Serie Mundial que terminó ganando Boston en seis juegos. Mientras el acérrimo rival festeja su octavo título, un pelotero de los Yanquis sufre una actualidad dura debido a una acusación de la que trata de defenderse sin que se vislumbre un golpe de efecto inmediato a su favor.
El director de operaciones de la MLB, Rob Manfred, lamentó la actitud de Alex. «Este nuevo, triste capítulo de la manchada carrera del señor Rodríguez es otro ejemplo de cómo este jugador trata de eludir su responsabilidad en sus malas decisiones». La liga no cesa en sus acusaciones dejando claro que «el uso de estimulantes por parte del señor Rodríguez fue más prolongado y generalizado que el de cualquier otro jugador, y cuando este proceso se haya completado», sentenció Manfred.
