Randall Phillip Volar, un hombre blanco, ya había sido arrestado anteriormente por abusar sexualmente de un niño afroamericano y estaba en posesión de pornografía infantil, incluido el contenido que había filmado, informó el New York Post.
Por Alejandro González
Los Ángeles, 7 de julio (La Opinión).– La Corte Suprema de Wisconsin falló a favor de Chrystul Kizer, quien supuestamente disparó y mató a Randall Phillip Volar cuando tenía 17 años.
Kizer, quien ahora tiene 22 años, conoció a Volar cuando ella tenía 16 y él 33.
El 5 de junio de 2018, supuestamente le disparó dos veces a Volar en la cabeza en su casa en Kenosha, Wisconsin, antes de incendiar su cuerpo y huir de la escena.
Kizer y sus abogados afirman que Volar la sometió a una serie de agresiones y la vendió en línea para tener relaciones sexuales.
El equipo de defensa de Kizer quiere usar una ley de Wisconsin que brinda protección legal a las víctimas de la trata si cometen delitos.
Para utilizar la disposición en defensa, el acusado debe probar que sus acciones fueron el resultado directo del abuso.
En un fallo de 4-3 el miércoles, la Corte Suprema del estado confirmó la decisión de un Tribunal inferior de ponerse del lado de Kizer y permitir que el caso de resultado directo se presentara en el juicio.
“Sostenemos que un delito es ‘cometido como resultado directo’ de una violación de los estatutos de trata de personas, si existe una conexión lógica y causal entre el delito y la trata tal que el delito no es el resultado, en una parte significativa, de otros hechos, circunstancias o consideraciones además de la infracción de tráfico”, se lee en el dictamen.
Si un jurado acepta el argumento de Kizer, podría ser absuelta.
“La decisión de hoy brinda la claridad necesaria con respecto al alcance de la defensa afirmativa para los sobrevivientes del vil crimen de la trata de personas”, dijo el Fiscal general de Wisconsin, Josh Kaul, quien argumentó contra Kizer, en un comunicado al Washington Post.
Colleen Marion, una de las defensoras públicas de Kizer, le dijo al diario New York Post que “el proceso legal sobre este asunto está lejos de terminar”.
“Nosotros, junto con Chrystul y su familia, creemos que la decisión de hoy afirma los derechos legales proporcionados por el estatuto de Wisconsin a las víctimas de tráfico sexual que enfrentan cargos penales”, dijo.
Kizer fue acusada de homicidio intencional en primer grado, operar un vehículo motorizado sin el consentimiento del propietario, incendio premeditado, posesión de un arma de fuego por un delincuente y salto bajo fianza, según el fallo judicial.
Kizer ha dicho que conoció a Volar en línea y él la vendió por sexo.
Volar, un hombre blanco, había sido arrestado anteriormente por abusar sexualmente de un niño afroamericano y estaba en posesión de pornografía infantil, incluido el contenido que había filmado, informó el New York Post.
En entrevistas con el diario, Kizer, quien es afroamericana, dijo que Volar estaba tratando de bajarle sus jeans cuando entró en pánico y lo atacó.
Volar supuestamente pagó un Uber para que le trajera a Kizer a su casa en Kenosha desde Milwaukee.
Anteriormente le pagó por sexo y ella vivió brevemente con él, afirmó.
Ella le dijo a los investigadores que estaba cansada del abuso de Volar.
Fue encarcelada durante más de dos años antes de que sus partidarios pagaran su fianza de 400 mil dólares en el verano de 2020.
Hubo protestas públicas por el caso cuando Kyle Rittenhouse, un hombre blanco, que también es de Wisconsin, fue absuelto en un juicio por matar personas en Kenosha, alegando defensa propia.
La próxima aparición de Kizer en la corte será en septiembre.
