Los cárteles de Sinaloa y Jalisco van por más tierras: ahora la batalla es en Chile

De acuerdo con las autoridades, Chile pasó de ser consumidor de droga, a un lugar de establecimiento de grandes organizaciones criminales.

Los Ángeles, 30 de junio (LaOpinión).– Parece que la guerra por los territorios entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación no solamente se limita a México y Estados Unidos, pues ambas organizaciones delictivas disputan el dominio en otros países de América Latina y Europa.

Así lo reveló el Gobierno chileno, al admitir que en ese país ya operan tres de los cárteles más peligrosos del continente, siendo dos de ellos los antes mencionados, además de la organización venezolana Tren de Aragua.

Al respecto, el subsecretario del Interior Manuel Monsalve, señaló en entrevista con el diario chileno Las Últimas Noticias, que estas bandas han reemplazado el delito individual típicamente registrado para llevarlos a gran escala.

“El delito que antes lo cometía una persona, ahora es realizado por organizaciones sofisticadas que planifican a gran escala el tráfico de estupefacientes, de inmigrantes, la trata de personas, el contrabando o los delitos de ciberseguridad”, dijo el funcionario.

Como ejemplo de la presencia de estas organizaciones, un avión del Cártel de Sinaloa trató de enviar 665 kilogramos de cocaína desde Chile al puerto de Rotterdam, en Holanda, mientras que el CJNG estableció un laboratorio en la ciudad chilena de Iquique, según reportó la Fiscalía chilena.

De esta manera, las evidencias y la presencia de gente de estos cárteles ya no dejan lugar a dudas sobre su injerencia en la región, pues hay que recordar que, en diciembre de 2021, elementos de la Policía de Investigación de ese país detuvieron a 20 presuntos integrantes del CJNG en la región de Melipilla, perteneciente a Santiago (capital).

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Durante el operativo se incautaron 63 kilogramos de cocaína, armas cortas, chalecos balísticos, tiros útiles, propiedades, lanchas y diversos automóviles de lujo, así como dinero en efectivo.

Las investigaciones establecieron que estos narcotraficantes, además de traficar drogas, también extorsionaban a pequeños comerciantes. “Esto es muy importante, no sólo por el daño de esta organización criminal por la venta de drogas, sino por la violencia con que actuaba, con la dominación territorial que ejercía bajo las amenazas, el uso y ostentación de armas de fuego”, aseguró en ese entonces la subsecretaria de Prevención del Delito, María José Gómez.

Por último, Monsalve explicó que el nivel de desarrollo de la delincuencia se da porque, “Estamos en un continente violento. América Latina y Centroamérica concentran el 8 por ciento de la población mundial, pero tiene el 40% de todos los homicidios que ocurren el mundo”.

“Nuestro país primero fue pasadizo de la droga a Europa y Asia, luego pasados a ser consumidores de droga y, ahora, somos lugar de establecimiento de grandes organizaciones criminales”, precisó el funcionario.

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