La tortuga que fue descubierta recientemente en una zona de depósitos del Triásico en el distrito de Guanling en China se caracteriza por poseer un pico desdentado, un torso corto sin caparazón y de cubierta en el abdomen.
Beijing, 23 de agosto (Xinhua).— El esqueleto fosilizado de una tortuga que habría vivido entre 228 millones de años atrás y la época en la que aparecieron los dinosaurios fue descubierto recientemente en China, y servirá para aclarar numerosas dudas en cuanto a las primeras etapas de la evolución de estos reptiles.
Se trata de la tortuga caracterizada por un pico desdentado más antigua descubierta hasta ahora. Con más de dos metros de largo, el animal posee un torso corto pero carece de caparazón y de cubierta en el abdomen, de acuerdo con Li Chun, investigador del Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados de la Academia China de Ciencias.
El ejemplar fue encontrado en una zona de depósitos del Triásico en el distrito de Guanling de la provincia suroccidental china de Guizhou, y los expertos le dieron el nombre de Eorhynchochelys, que significa «primera tortuga con pico«. El descubrimiento fue publicado en la edición más reciente de la revista Nature.
«Estamos muy familiarizados con las tortugas modernas, pero las primeras etapas evolutivas de estos animales siguen siendo uno de los grandes misterios de la paleontología«, dijo Li, quien lideró la investigación.
El cuerpo de una tortuga es bastante diferente del de todos los demás tetrápodos, como los lagartos, los cocodrilos, las aves y los mamíferos. El torso de una tortuga es muy corto, y está envuelto por el caparazón. Las tortugas modernas tienen picos desdentados similares a los de las aves, explicó Li.
La discrepancia entre las tortugas y los otros tetrápodos es tan amplia como la diferencia entre un teleférico y los demás automóviles, ejemplificó.
¿Cómo evolucionó la tortuga hasta llegar a tener su particular estructura esquelética?
Hasta 2008, la tortuga más antigua y primitiva descubierta, llamada Proganochelys, se remontaba hacia unos 200 millones de años atrás y tenía la misma estructura corporal que las tortugas modernas. Contaba ya con un caparazón completo y un pico.
Li ha dedicado 20 años al estudio de réptiles fosilizados en Guizhou y la vecina Yunnan, y ha descubierto 12 nuevas especies. En 2008, él encabezó el equipo que encontró un fósil de tortuga primitiva en el mismo distrito de Guanling.
Ese ejemplar, llamado Odontochelys, que quiere decir «tortuga con dientes y semi-caparazón», tiene una edad cercana a los 220 millones de años y era hasta entonces la más antigua conocida. Era la primera vez que se veía una criatura que estaba un paso antes en la evolución de las tortugas.
Luego, en 2015, otra tortuga primitiva, Pappochelys, de unos 240 millones de años, fue descubierta en Alemania.
Ese mismo año, Li vio un fósil de la colección del Museo de Paleontología Marina de Sanya, en la provincia meridional de Hainan.
«Parecía una tortuga primitiva. Imaginé que podrían haberla descubierto en Guanling, pero evidentemente nadie sabía de qué animal en particular se trataba», comenta Li.
El experto y su equipo tardaron un año reparando el fósil e investigando su origen.
Finalmente establecieron que provenía de un lugar distante pocos kilómetros de aquel en el que había sido encontrada la Odontochelys en 2008.
Un análisis realizado por un equipo conjunto de investigadores de China y los Museos Nacionales de Escocia, el Museo Field de Historia Natural de Estados Unidos y el Museo Canadiense de la Naturaleza mostró que la posición evolutiva de Eorhynchochelys está entre Odontochelys y Pappochelys, y que se trata de un eslabón de la historia natural de las tortugas que estaba perdido.
El reptil descubierto en Guizhou tiene características primitivas, derivadas y transicionales, lo que indica una complejidad en la etapa temprana de la evolución de la especie, sostuvo Li.
«Su esqueleto sugiere que el ejemplar podría haber llevado una vida anfibia cerca de un estuario, y que uno de sus hábitos era cavar hoyos», agregó el experto.
«Con el descubrimiento de los fósiles de tortugas recientes, más y más evidencias sugieren que estas evolucionaron gradualmente. Creo que nuestro nuevo descubrimiento respalda la teoría de Darwin de que la evolución biológica se registró paso a paso», manifestó.
Analistas de Nature comentaron que el hallazgo es supremamente importante, ya que cierra una brecha crucial en la evolución de las tortugas, y señalaron que es más complejo de lo que se creyó en un comienzo.