Son pequeñas, coloridas y con sabor único, además de grandes propiedades saludables. A continuación, describimos algunas de sus beneficios y la importancia de su cosecha en el país, para la economía, salud y el paladar de los mexicanos.
Ciudad de México, 25 de agosto (SinEmbargo).– Son las fresas, los arándanos, las frambuesas y las zarzamoras, principalmente. Se dan en el centro del país, sobre todo en Michoacán y Jalisco y generalmente en la época de lluvias, aunque su exportación está activa todo el año. Son antioxidantes, es decir, retrasan los efectos negativos que el estrés, la contaminación y la mala alimentación provocan en las células. Y como todas las frutas, son altamente saludables en su estado natural.
En el mundo son conocidas como berries, que se podrían traducir literalmente como «bayas», sin embargo, este término en español se refiere a las frutas generadas a partir del ovario de una sola flor, en la que su capa externa se convierte en la parte comestible, tal como el plátano, la uva, el pepino y la berenjena.
Para evitar confusiones, en México se les conoce como frutos del bosque o frutillas. Comercialmente, como frutos rojos o bayas mexicanas.
Juan José Flores García, director de Aneberries, una asociación que consolida a las empresas exportadoras de frutillas en México, dice a Mundano que normalmente la temporada de exportación inicia a finales de septiembre y concluye en julio, sólo en el caso de la fresa, es en los meses invernales (de noviembre a marzo), tiempo en el que envían a 32 países, entre ellos Chile, Canadá, Estados Unidos, Países Bajos, Japón y Reino Unido.
Datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), el país es el quinto productor mundial de frutillas y se encuentran a la par del ganado bovino, la confitería y la cebolla, en el cuarto lugar de las exportaciones agroalimentarias.
Son 21 estados los que producen berries, pero el volumen de producción es cubierto en 96.8 por ciento por Michoacán, Jalisco, Baja California y Guanajuato, estados en los que las condiciones de suelo y temperatura, con noches frescas y días calurosos, lo hacen posible, además de su disponibilidad de agua y mano de obra.
SUS BENEFICIOS
Para el ingeniero Flores García, uno de los aspectos más importantes de la producción de frutillas es la generación de divisas, «en la temporada 2016 cierra con alrededor de mil 560 millones de dólares de ingreso. La otra es la generación de empleos, con un promedio de 10 personas por hectárea, entonces unos 330 mil empleos generados, pues hay 33 mil hectáreas de cultivo. Y tienes a la par un crecimiento de proveedores de insumos, plantas, sistemas de riego, plásticos», dice en entrevista.
Sin embargo, sus beneficios van más allá de la macroeconomía, pues se ha comprobado que tienen propiedades antioxidantes y desinflamatorias, gracias a un par de compuestos llamados antocianinas y proantocianidinas, que además regulan la glucosa en la sangre.
Pero, ¿todo esto para qué sirve? Las primeras son las que dotan a los frutos y vegetales del color rojo, morado y azul, que promueve la sensibilidad a la insulina y disminuyen el nivel de glucosa en la sangre. Además de que tienen el poder antioxidante que se mencionó anteriormente y para inhibir la inflamación, altamente relacionada con enfermedades crónico-degenerativas como el cáncer, diabetes o padecimientos cardiovasculares.
Las proantocianidinas, por su parte, ayudan a la inhibición en la acumulación de lípidos en las células. Además, poseen calcio, potasio, yodo, silicio, fósforo, magnesio, vitamina C, A y E, B1, B2, B3 y B6, K, según información del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Por todo lo anterior, se les relaciona también con la purificación de la vejiga y el mejoramiento de la piel y la memoria.
En México, son cuatro las principales futillas en producirse: los arándanos rojos y azules, las fresas, las frambuesas y las zarzamoras.
ARÁNDANOS
Se produce principalmente en Jalisco, Baja California y Colima, aunque se produce en 9 estados de la República, que en 2015 dieron un total de 15 mil 489 toneladas, según el atlas alimentario.
Es de forma esférica, que mide de 1 a 2 cm de diámetro, de color azul intenso a suave, de ahí que su nombre en inglés sea blueberry, mientras que los arándanos rojos son llamados cranberry.
Generalmente se consume en fresco, deshidratado o se utiliza como insumo para mermeladas, puré, jugos, vinos e ingredientes para pastelería y cereales. En algunos lugares también se vende congelado; sin embargo, la mayor parte de la producción nacional se exporta, de acuerdo con Sagarpa.
FRAMBUESAS
México es el quinto productor a nivel mundial de frambuesa, con 30 mil 411 toneladas anuales. Se cosecha principalmente en Jalisco, Baja California y Michoacán, sobre todo en el mes de diciembre.
Las frambuesas son rugosas, aproximadas y de colores rojo o amarillento, cuyo fruto tiene adherido un pelo de color amarillo oro.
Se consume sobre todo en fresco y en forma de conservas caseras e industriales; también se utiliza para elaborar aromatizantes y jarabes. Pueden ser congeladas, pero una vez descongeladas, quedan remojadas y con otro aspecto, por lo que se aprovechan para otras preparaciones.
FRESAS
Son las frutillas más consumidas en el país, con 1.4 kilos per cápita (contra los 5 gramos del arándano), hacen de México el tercer productor a nivel mundial, por debajo de China y Estados Unidos.
Su recolección es manual debido a que la fruta es altamente sensible y lo mejor para su desarrollo son los días cortos y las temperaturas bajas.
Los principales estado son Michoacán, Baja California y Guanajuato. Claro, ¿quién no conoce las fresas de Irapuato, cristalizadas o con crema? Se suelen comer como un postre al natural, con azúcar o con nata, pero también son un insumo importante para la industria alimentaria como la pastelería para hacer pasteles, mousses, suflés, así como en confitería. O también se elaboran mermeladas y jaleas.
ZARZAMORAS
La blackberry es una fruta carnosa formada a su vez por frutos más pequeños, con un sabor dulce y aromáticos.
Se consume fresca como postre, tal como se vende en el mercado. Aunque la industria la usa para elaborar jugos, pulpas, saborizantes para yogurt y helados, jaleas y ates. Además, se cree que tiene facultades medicinales, en las que se aprovechan las hojas, los frutos y la raíz.