El juego nos presenta un panorama tenebroso, una ciudad que ha sido invadida por seres sobrenaturales y donde no existen más que espíritus buenos y malos. Gráficamente, el juego luce espectacular y la ciudad de Tokyo, tanto en exteriores como en diferentes interiores a los que tendremos acceso, con estos diferentes cambios entre realidades, logran una gran atmósfera.
Ciudad de México, 27 de marzo (SinEmbargo).- Después de la llegada de Deathloop en septiembre del año pasado como exclusiva en consolas para el PlayStation 5, sabíamos que aún quedaba una última carta, esta muy probablemente representa el último título que veamos por parte de Bethesda en consolas PlayStation tras ser adquirida por Xbox. Aunque se tratan de exclusivas temporales que verán la luz algún día en Xbox Series S y X, por el momento, Deathloop se posicionó como una de las sorpresas más grandes del año pasado y Ghostwire: Tokyo tiene una esencia muy peculiar que puede ser del agrado o no de muchos jugadores, con una ciudad de Tokyo, perfectamente representada y detallada dentro de una atmósfera un tanto escalofriante con una historia que por momentos se vuelve bastante confusa en un entorno sobrenatural, pero que gracias a su sistema de juego y combate nos da una de las experiencias más frescas y emocionantes en lo que va del año.
Ghostwire: Tokyo llega de la mano de Tango Gameworks, el estudio del mítico Shinji Mikami, el creador de Resident Evil, que durante la última década nos ha traído una de las sagas más terroríficas de los últimos años con The Evil Within. En esta ocasión mantiene la esencia del juego con una base de terror, pero está más enfocado en un mundo sobrenatural y en los fantasmas; nos cuenta la historia de cómo una misteriosa figura provoca la desaparición de miles de personas a lo largo de Tokyo, convirtiéndolos en espíritus y dando paso a entes del más allá, así, la historia nos presentará a dos personajes en conjunto, “Akito”, el cual muere momentos antes del inicio de este suceso sobrenatural y que a su vez es poseído por un detective fallecido que conocemos como “KK”, donde a lo largo de la historia, ambos se ven beneficiados de esta relación, ya que el detective continúa su investigación de los sucesos sobrenaturales y su origen mientras “Akito” busca ayudar a su hermana quien se encuentra hospitalizada. Una relación que va avanzando a lo largo del juego y que crea una sinergia bastante interesante entre estos dos personajes siendo uno mismo.
Dicho esto, el juego nos presenta un panorama tenebroso, una ciudad que ha sido invadida por seres sobrenaturales y donde no existen más que espíritus buenos y malos, lo cual representa una especie de limbo donde a lo largo de diferentes misiones y seres ancestrales basados en las creencias de Japón como animales, muñecas o las mismas personas necesitarán de nuestra ayuda para poder estar en paz de una vez por todas, sin embargo, los enemigos que nos encontraremos serán algunos más fuertes que otros y en ocasiones con formas distintas a los de una persona normal, sin rostro, dentro de una ciudad de Tokyo hundida en las sombras.
Podremos explorar diferentes zonas de la ciudad, purificar zonas de la oscuridad, recolectar almas, completar misiones secundarias que nos llevarán por diferentes áreas, así como la obtención de habilidades y el conocimiento de los diferentes sucesos que ocurren en el juego, así como un panorama mucho más amplio de la historia principal. El mapa nos plantea diferentes puntos de interés que nos llevarán a un recorrido bastante interesante a lo largo de la ciudad, donde si bien podremos obtener recompensas, comida y punto conforme completemos diferentes tareas, también sirve como un método de exploración para diferentes zonas, donde no todas estarán disponibles hasta que hayamos las hayamos purificado, siendo un constante viaje de ida y vuelta que en ocasiones resulta bastante emocionante y terrorífico. Algo esencial dentro del juego es lo viva que se siente una ciudad donde básicamente tu eres el único ser con vida, pero las diferentes zonas, los enemigos, las misiones y cada elemento dentro del juego, crean una atmósfera de constante tensión donde nunca estarás en paz y eso se vuelve un gran punto de apoyo para la experiencia general del juego.
Gráficamente, el juego luce espectacular y la ciudad de Tokyo, tanto en exteriores como en diferentes interiores a los que tendremos acceso, con estos diferentes cambios entre realidades, logran una gran atmósfera y un estilo que en muchas ocasiones nos recordará a Silent Hill, pero que, a su vez, mantiene una esencia única que desarrolla a lo largo de la historia y que logra transmitir en cada rincón que exploremos.
Esta atmósfera de tención, sólo podía mejorar con un sistema de juego y combate a la altura de la narrativa y la realidad es que este apartado es de lo mejor del juego, donde a lo largo de la historia tendremos accesos a poderes sobrenaturales con diferentes elementos que podremos adquirir conforme avancemos, estos diferentes ataques y habilidades que se pueden mejorar en diferentes árboles de mejoras nos dan una experiencia de combate sobresaliente, pero con demasiadas limitaciones, lo cual hace que la tensión sea constante, así como el ser perseguido por enemigos hasta que sean derrotados. Tendremos ataques que serán más efectivos a cierto tipo de enemigos y que mientras los usemos, también se irán consumiendo, por lo que en ningún momento llega a sentirse como una victoria segura y te hará contar cada ataque que realices de manera efectiva o no.
Ghostwire: Tokyo es una sorpresa bastante peculiar dentro de una temática sobresaliente traída por uno de los padres del género de “survival horror” y aunque en momentos, sobre todo al inicio puede parecer algo lento y con mecánicas algo torpes, es un progreso en constante mejora y que nos ofrece nuevas experiencias conforme vayamos avanzando, hasta que todos los elementos dentro de la historia, personajes, ambientación y sistema de juego lleguen al punto máximo que represente lo que es esta nueva saga.