Cuando la temperatura del agua permanece elevada durante un tiempo prolongado, las algas, que proveen nutrientes y generan los colores intensos, se desprenden. Por eso los arrecifes de coral quedan blancos.
Sídney (Australia), 20 abr (EFE).- El 93 por ciento de la Gran Barrera de Arrecifes, que se extiende a lo largo de 2 mil 300 kilómetros a lo largo de la costa nororiental australiana, ha sufrido blanqueo en los corales, según revela hoy un estudio.
La investigación aérea y submarina, que ha registrado blanqueo en forma muy severa, moderada y leve, muestra dramáticas diferencias entre el norte y el sur de este sistema, informó en un comunicado la Universidad James Cook.
«Nunca vimos algo similar a esta escala de blanqueo de corales. En el norte de la Gran Barrera es como si éste hubiese sido golpeado por diez ciclones al mismo tiempo», dijo Terry Hughes, coordinador del Grupo de Trabajo Nacional contra el Blanqueo de Corales.
«El blanqueo es extremo en la región de mil kilómetros comprendida entre Port Douglas hasta arriba en el norte del Estrecho de Torres, entre Australia y Papúa Nueva Guinea», detalló por su lado, Andrew Baird, de la Universidad James Cook al hablar del estudio que abarcó más de 900 arrecifes.
En esa remota zona se calcula una media del 50 por ciento de la muerte de los corales, aunque en algunos casos la mortandad superará el 90 por ciento de estos organismos.
«Cuando el blanqueo tiene esta severidad afecta a casi todas las especies de corales, incluyendo a los corales antiguos, de crecimiento lento que, una vez perdidos, tomará décadas o más para que se regeneren», acotó Baird.
Los científicos notaron que en la parte central de la Gran Barrera, que abarca 600 kilómetros, el daño es moderado, mientras que en el sur de este sistema de arrecifes, la mayoría de los corales registran daños moderados o leves, por lo que se espera una pronta recuperación de estos organismos.
Solamente el 7 por ciento de la Gran Barrera de Arrecifes se ha salvado del blanqueo de corales.
Asimismo los investigadores también detectaron que en la costa occidental australiana se está registrando un proceso de blanqueo de corales a gran escala causada por el aumento de la temperatura de las aguas en los dos lados del país oceánico.
Los corales mantienen una relación simbiótica especial con unas algas microscópicas llamadas zooxanthallae, que proporcionan a sus anfitriones el oxígeno y una porción de los compuestos orgánicos que producen mediante la fotosíntesis.
Cuando están sometidos a estrés ambiental, muchos corales de arrecifes expulsan en masa sus zooxanthallae, y los pólipos del coral quedan sin pigmentación y aparecen casi transparentes sobre el esqueleto blanco del animal, en un fenómeno conocido como blanqueo.
La salud de la Gran Barrera, que alberga 400 tipos de coral, mil 500 especies de peces y 4.000 variedades de moluscos, comenzó a deteriorarse en la década de 1990 por el doble impacto del calentamiento del agua del mar y el aumento de su acidez por la mayor presencia de dióxido de carbono en la atmósfera.