Naciones Unidas, 9 ene (EFE).- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, reiteró hoy que la institución tiene una política de «tolerancia cero» ante los abusos sexuales cometidos por los «cascos azules», como el caso de los militares uruguayos integrantes de las fuerzas internacionales de paz desplegadas en Haití y acusados de la presunta violación de un joven.
Ban «ha repetido que la ONU tiene una estricta política de tolerancia cero hacia los delitos sexuales cometidos por tropas de las fuerzas internacionales de paz», señaló el portavoz de la ONU, Martin Nesirky, en relación al proceso judicial que se sigue en el país latinoamericano relacionado con un caso ocurrido en el país antillano.
El portavoz de la ONU señaló que el organismo «conoce las informaciones de que los soldados han sido liberados después de un proceso judicial seguido por las autoridades uruguayas en relación a infracciones militares», al tiempo que señaló que también conocen que «el proceso judicial sigue en relación a las acusaciones criminales más serias».
«Si son declarados culpables, todavía pueden ser detenidos y sentenciados», agregó la fuente, que subrayó que «corresponde a los Estados que aportan las tropas investigar y perseguir los casos de mala conducta de las fuerzas internacionales de paz».
Cinco marinos uruguayos integrantes de la Misión de Paz de Naciones Unidas en Haití (Minustah) fueron procesados y encarcelados el pasado septiembre por la Justicia militar del país suramericano acusados de los delitos de desobediencia, omisiones al servicio y desafuero a la vigilancia militar.
También son investigados por la Justicia civil de Uruguay por la presunta violación de un joven haitiano, que reclamó al Gobierno del país latinoamericano una indemnización de cinco millones de dólares a través de la petición de un grupo de abogados.
A principios de enero, el subsecretario de Defensa de Uruguay, Jorge Meléndez, señaló que algunos de los cinco implicados en el abuso están en libertad condicional, a la espera de que se complete su proceso judicial.
Los abusos de los que se acusa a los marinos sucedieron en la localidad de Port Salut (sur de Haití) y fueron difundidos por internet en un vídeo grabado con teléfono celular.
Las imágenes muestran a cuatro de los cinco involucrados (el quinto es quien las tomó) burlándose de un joven al que mantienen tumbado boca abajo en un colchón, mientras uno de ellos se coloca detrás de él con el torso desnudo.
En su defensa, los militares uruguayos que admitieron que conocían al joven, adujeron que se trató de una «broma pesada».
Al margen de esa acusación de violación, los militares también están siendo juzgados por la Justicia militar por los supuestos delitos cometidos durante su estancia en Haití, como el haber permitido a un civil entrar en el cuartel. EFE