El Secretario de Justicia, Merrick Garland, argumentó ante una Corte federal de Florida el interés «claro y poderoso» del público estadounidense por saber lo que ocurrió cuando agentes del FBI allanaron un domicilio de Palm Beach perteneciente al expresidente Donald Trump.
Por Eric Tucker y Michael Balsamo
WASHINGTON, 11 de agosto (AP).— El Departamento de Justicia de los Estados Unidos le ha pedido a un tribunal desprecintar la orden de allanamiento que el FBI recibió para registrar la finca Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump, informó el jueves el Secretario de Justicia, Merrick Garland, reconociendo el extraordinario interés público en el caso.
La solicitud fue notable porque tales documentos tradicionalmente permanecen sellados durante una investigación pendiente. Pero el Departamento de Justicia pareció reconocer que su silencio desde la búsqueda había creado un blanco para ataques del expresidente y sus aliados, y Garland consideró prudente responder a las exigencias generalizadas de detalles sobre lo que llevó a la medida del FBI.
“El interés claro y poderoso del público en comprender lo que ocurrió bajo estas circunstancias pesa enormemente a favor de desprecintar”, señala una moción presentada el jueves ante una Corte federal de Florida para solicitar la remoción de la precinta.
Garland también señaló que el propio Trump ha ofrecido la primera confirmación pública del allanamiento del FBI, y el Secretario de Justicia dijo que divulgar la información al respecto ahora no dañará las funciones de la Corte.
Garland agregó que él aprobó personalmente la orden de registro, que formaba parte de una pesquisa en curso del Departamento de Justicia sobre el descubrimiento de archivos confidenciales de la Casa Blanca recuperados de la finca Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida, previamente este año.
De momento se desconoce cuándo se podría conceder, en caso de que suceda, la solicitud de desprecintado o cuándo se liberarán los documentos. Trump también tendrá la oportunidad de objetar.
Por otro lado, el secretario de Justicia condenó los ataques verbales contra el personal del FBI y del Departamento de Justicia por el allanamiento.
“No me quedaré callado cuando su integridad es atacada injustamente”, dijo, llamándolos “servidores públicos dedicados y patrióticos”.